Naruto solo quería vivir una vida tranquila, tal vez conocer un buen alfa y poder formar una familia a su lado. Lo que no se esperaba, es que sería secuestrado y regalado a un alfa involucrado en la mafia, mucho menos se esperaba que este se convert...
El omega aun se encontraba recargado en la puerta intentando calmarse por lo sucedido, aunque lo siguiente a pasar no lo vio venir, pues de un momento a otro la puerta fue abierta, haciendo que cayera de espaldas, chocando con algo firme, sintió enseguida como unos brazos lo rodeaban, acercándolo más con lo que había chocado, provocando que se pusiera nervioso por el aroma tan atrayente.
-¿Pasó algo Naruto? ¿O es qué querías que nos bañaramos juntos? Si fuero lo último, no tengo ningún problema un cumplir tu deseo.-Susurró en el oído para luego dirigir su rostro al cuello del menor, olfateando aquel delicioso aroma.
-N-no es eso, si no que...ngh~-Soltó un pequeño jadeo al sentir como la lengua del alfa recorría su cuello, haciendo que un escalofrío recorriera su cuerpo.
El ruso estaba que saltaba de alegría, y aún más su alfa interno al ver lo que su presencia provocaba al menor, podía sentir su nerviosismo.
Lentamente giró al menor para poder presenciar una imagen demasiado tentadora, aquel rostro sonrojado y los ojos un tanto cristalizados, si, era una imagen demasiado tentadora para él.
Por otro lado, el pobre omega estaba estaba que se le salía el corazón al ver aquel torso desnudo, parecía una tableta de chocolate, sentía que le daría algo cuando el alfa se acercaba.
-La cena...si eso. La cena, tengo que prepararla.-Murmuró sacando fuerzas de donde empujó al alfa para salir corriendo del lugar.
-Supongo que es muy pronto para él.-Dijo con una risa para luego entrar a la ducha.
En la cocina ya se encontraba el omega con las piernas temblando por la situación que minutos antes había experimentado, decidió dejar de pensar en ello para comenzar a cocinar algo, pero al ver los muebles se dio cuenta de un pequeño detalle y eso era que el alfa definitivamente no cocinaba por las pocas cosas que habían, decidió hacer algo sencillo con lo que tenía a su alcance, ya le comentaría al mayor sobre ello.
Luego de varios minutos tenía lista la comida, haciendo que una sonrisa se le dibujara en el rostro al ver la buena pinta que tenía el platillo, con cuidado lo dejó en la mesa mientras Sasuke bajaba y se sentaba en la mesa.
-Вкусный-Dijo con una sonrisa al probar la comida.
-Me alegro que te guste.-Dijo con una sonrisa divertido de aquella faceta del mayor viendo que este le miraba con una linda sonrisa dibujada en su rostro.-Etto...si no te molesta, puedo seguir cocinando. Claro que tendíamos que comprar varias cosas, no hay mucho aquí.
-Nunca fui bueno en aquella área, así que siempre comía afuera- Respondió para no decir que hasta el agua se el quemaba.-Pero acepto tu propuesta Naruto, me encantaría probar todas las delicias que cocinas.
Durante la cena fue todo estuvo calmado, hablaron de algunas cosas para luego de lavar los platos, el ruso llevó las bolsas de las compras hasta la habitación que ahora sería del menor.
Ya era de noche, pero el menor no lograba dormir, se daba vueltas de un lado a otro en la cama. Decidió ir a la cocina a preparar una taza de leche caliente para ver si con ello el sueño le invadía, lentamente abrió la puerta de su habitación, asomó su cabeza para luego salir de esta al ver que el alfa no se encontraba en el pasillo.
Con pasos lentos bajó las escaleras hasta llegar a la cocina y comenzar con le preparación de su leche.
Estaba tan sumergido en su labor que no se dio cuenta que cierta persona se encontraba en la cocina en busca de un vaso de agua, reaccionó hasta que una mano tocó su hombro haciéndolo sobresaltar y perder el equilibrio, cuando abrió los ojos, se dio cuenta de que se encontraba sobre el alfa quien también abría los ojos para mirarla de arriba a abajo, provocándole que la vergüenza se apoderara de el.
Se maldecía internamente por la vestimenta que había optado por ponerse. Pese a ello, lo que traía puesto era lo más discreto que la vendedora había elegido para el.
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El ruso ya no soportaba más, no al verlo vestido de esa manera. Las prendas le favorecía increíblemente, detalle del que probablemente el omega no se había percatado. Sus piernas se veían tan deliciosas a la vista del alfa que le daban ganas de recorrerlas hasta perderse bajo la tela.
Mientras tanto, el pobre omega estaba echo un manojo de nervios, sentía sus piernas gelatina, sentía que no podía colocarse de pie correctamente, pero lo que le desarmo por completo fue el repentino movimiento del alfa, el ruso había cazado sus labios en un demandante beso que le hizo gemir, cada segundo se volvía más demandante y profundo que a duras penas lograba corresponderlo, ahogo un gemido cuando sintió dos manos apretar su trasero, haciendo que arqueara su espalda, provocando que rozara con cierta parte de la anatomía de alfa, pero lejos de disgustarle y de alejarlo, le encantaba aquella sensación que el alfa lograba crear en su cuerpo.
-C-cuando es q-que-Intentaba decir Naruto una vez que se separaron. Se percató de que ahora es encontraba sentado en la barra de la cocina junto con la seductora sonrisa del alfa, quien en cosa de segundos había vuelto a besarle, haciendo que todo su cuerpo vibre por las sensaciones que le provocaba el beso.
-Buenas noches моя любовь- Dijo dándole otro pequeño beso antes de salir del lugar, dejando al pobre omega confundido, con su cuerpo ardiendo, jadeando, con un gran sonrojo en sus mejillas y teniendo dos cosas claras, una era que esa noche no lograría dormir y la segunda que debía de cambiar de pijama.
