"DESTINO O CONSECUENCIA"|| Edward Cullen y Jacob Black

CAPITULO 3

"~Llegada a Forks, tío Charlie y su timidez~"

El vuelo estaba yendo perfectamente bien: el clima era favorable, no había turbulencia y sobretodo no había bebés a bordo; simplemente perfecto, pero para Selene era una verdad a medias o una estrategia para sus nervios, se convencía de que todo irá bien si así lo piensa.

Selene volvía a pensar en lo que le deparaba el destino en Forks y en lo que había dejado atrás. El  pueblo con nombre de cubierto no sería la mitad de lo que era Queens y sus alrededores. Ella siempre soñó con vivir donde su héroe favorito, este describía New York como hermoso y caótico; y para Selene Forks era hermoso, pero no caótico. Pensaba que la tranquilidad le abrumaría y se aburriría, no obstante tenía a Bella y a su tío  Charlie para llenar su vida de calidez.

El avión había aterrizado y con ello sus 6 horas de tortura, la joven mujer empezó a bajar y sintió el frío abrumador, "si  así está el avión , ya imagino como será Forks" pensó la joven mientras caminaba por el pasillo del avión hacia el interior del aeropuerto.

En la sala de espera la joven buscó con la mirada entre todos las personas para buscar a Bella y a su tío, paso un momento y vislumbró a una cabellera castaña parecida a la de su padre y un bigote característico de una hombre mayor, como lo era su tío Charlie.

Selene con una sonrisa empezó a caminar hacia su tío mientras busca a Isabella por los alrededores, pero no la encontró por ningún lado.

-Buenas tardes, caballero. Estaba buscando al sheriff más guapo del condado, ¿usted lo ha visto? - dijo la joven con una voz fingida mientras abrazaba a su tío.

El policía volteo rápidamente por el comentario y viendo de quien se trataba correspondió el abrazo tímidamente, Isabella había heredado eso de él.

-Hola,- saludo separándose del abrazo -¿cómo te fue en el viaje? - pregunto mientras tomaba la maleta de la mano de Selene.

-Muy bien, tío- dijo emocionada, tenía tiempo sin ver a su único tío. - Solo un poco de turbulencias, pero de ahí en más muy bien. - aclaró mientras caminaban hacia la salida del aeropuerto, o mejor dicho un helipuerto pequeño.

-Es perfecto-dijo el sheriff mientras subía la maleta en la cajuela del carro policía. -, en la casa hay pizza para celebrar tu llegada- anunció mientras subí al carro.

Selene sabía que su tío no era de hablar mucho pero está vez se encontraba raro, la última vez que lo visitaron no actuaba así.

-Me parece perfecto, tío. Espero que hayan pedido una vegetariana para Isa- dijo subiéndose al asiento del copiloto.

Su tío oyó aquello y se tenso, debía de contarle la verdad a Selene. El hombre arrancó el carro estando en silencio unos minutos.

-Te tengo que decir algo, hija.- aviso sin despegar la mirada del camino- Isabella se caso hace unos días y en este momento están en la luna de miel. -

Selene casi se quiebra el cuello de tan fuerte que volteo a ver a su tío, sus ojos están desorbitados en una cara de asombro. ¿Su joven prima casada a los 18?, alguien si que tenía el nitro abierto.

-Estas bromeando, tío. Isabella no se casaría tan pronto, es joven todavía- dijo con asombro y desconfianza.

La joven noto que el semblante de su tío no cambió en ningún momento dándole una bofetada de verdad. Su tío no estaba bromeando.

-oh, mierda-dijo con asombro y se tapó la boca con su mano al darse cuenta que había dicho una palabra antisonante. Su tío la miró con reprimenda. - Lo siento, no puedo creer esto. ¿Me jura que no está bromeando? - preguntó con gesto incrédulo.

Su tío se limitó asentir y dar un pequeño sonido de afirmación.

-Así que tú tendrás su habitación por el momento ya que estoy reparando unas cosas del ático- sentenció para después callar y encender el radio del carro.

Charlie era tan predecible que Selene podía entender todo sin palabras, calló y dio por terminada la conversación ya que sabía perfectamente que ese era un tema sensible para él. La joven se limitó a ver el horizonte por la ventana y al poco tiempo vio una sombra pasar entre los frondosos árboles, pero no le  tomó importancia alguna. "A lo mejor fue un animal salvaje" pensó la joven.

Habían llegado a la casa de la familia Swan, la fachada era pulcramente blanca al estilo americano. Su tío estacionó el auto y aguardo un momento para decir.

-Hogar, dulce hogar.-dijo mientras bajaba del auto aguardando un poco para la joven le siguiera el paso.

-Sigue igual de bella, tío. - sentenció yendo junto a su tío que ya había bajado la maleta y la bolsa de mano. - Nunca me cansaré de decirlo, simplemente sacada de una novela. -

La joven y el adulto caminaron a la par hasta la entrada, y esperando a que el tío Charlie abrirá la puerta.

-Bienvenida seas, Selene. - dijo el hombre para dejar pasar primero a la joven, para después pasar detrás de ella cerrando la puerta. - Espero y sea de tu agrado. -

Selene miró todo como siempre era, la sala con ese viejo sillón en donde su tío miraba todos los partidos; la hermosa cocina y las estrechas escaleras hacia la segunda planta. La joven miró a su tío y camino con rapidez hacía él.

-¡Muchas, muchas gracias, tío! -dijo mientras lo abrazaba efusivamente. - para que vea que soy un buena sobrina, mañana prepararé las 3 comidas del día. ¿Le parece bien? - preguntó mientras lo soltaba, dejando a su tío un poco sonrojado por la muestra de afecto a las que él no estaba acostumbrado.

-Me parece bien- contestó- solo que yo lavare los platos. - afirmó sin esperar respuesta.

La joven lo miró con determinación y antes de hablar espero a que su tío continuará.

-Mañana vendrá una amiga a cenar-dijo mientras volteba su mirada al suelo. Selene lo vio como un signo de vergüenza, no era de esperarse, su tío llevaba más de 15 años solo y estarle explicando a una chiquilla no era su fuerte.

-Así que amiga, ¿no será su novia y me lo está ocultando por pena? - pregunto Selene con un poco de inquisitez en su voz tratando de hacer sentir a su tío más tímido. - ¿Es bella? ¿Cómo se llama? ¿Tiene dos ojos? ¿Dos piernas o acaso tiene dos manos? - dijo infantilmente dando vueltas alrededor del hombre.

-Ya, ya. -dijo con exasperación- Solo somos amigos y no quiero hacerla sentir presionada. -dijo caminando hacia la cocina. - Se llama Sue Clearwater y tiene dos hijos. - tomó un vaso y lo lleno de agua para después llevarlo a sus labios. - Te deje una repisa vacia en el baño. -

Selene tomó su maleta y empezó a caminar hacia las escaleras subiendolas por completo hasta la habitación que le pertenecías a Isa. La cama estaba perfectamente tendida y sin ningún arruga, miró alrededor y no vio ninguna pertenencia de Isabella en ella.

-Entonces sí se casó, - murmuró sentándose en la cama. - pues bien por ella.-dijo con una sonrisa.

La joven empezó a desempacar llevándose así la tarde, al dar las 6 en punto bajo a la sala para por fin cenar con su tío. Se encontró con este dormido en su sillón y prefirió no molestarlo y comer ella sola en su habitación.

Al finalizar su cena encendió su computadora para mandarle un mail a su familia, <<Hola, ¿cómo están? espero que muy bien. Yo llegue perfecto a Forks, estoy emocionada de estar aquí. Padre si estas leyendo esto te tengo un chisme del tío Charlie, cuando tengas tiempo me llamas; si es mamá la que está leyendo esto corre y dile a papá que estaré esperando su llamado. Los quiere, Selene. Psdt. Diganle a Izar que no tome mis cosas de mi cuarto y que si las toma las ponga donde estaban, denle un fuerte abrazo.>>

El tiempo se le fue a Selene leyendo algunos blogs en Internet y cuando menos lo espero era muy tarde, apagó el computador y fue al baño a preparase para dormir viendo de paso que su tío ya no estaba abajo, claramente ya estaba en su habitación. La noche era fría y solitaria pero para Selene fue una noche mejor que ninguna otra, cosas nuevas le esperaban mañana.