"DESTINO O CONSECUENCIA"|| Edward Cullen y Jacob Black

CAPÍTULO 15

"Verdad oculta"

Los trompicones del auto habían parado y sabía que habíamos llegado a donde fuera que lo hacíamos. Sentí el frío en mis piernas y con fuerza tomaron mis piernas para cargarme como un maldito costal de papas, podía ver la gravilla del camino a donde íbamos y la espalda de quien me cargaba.

De un momento a otro la calidez de las luces interiore me cegaron noqueándome de nuevo, estruendosas voces se escuchaban a mi alrededor como mortales mosquitos tratando de atacar mi cuerpo. 

---¿Qué hace ella aquí?--- escuche decir con sorpresa a lo lejos a una voz femenina

Los ruidos a mi alrededor no cesaban y empezaban a dolerme la cabeza , solté un gemido doloroso al caer sobre un colchón duro.

---Lo siento--- escuche decir con culpa a un hombre

En cuanto empecé a cerrar mis ojos , algo quemo mi nariz al respirar.

---¡Arde!--- Me queje y monote intentando quitar lo que fuese que estuviera en mi nariz. 

 Mi manos golpearon a unas manos duras como el hierro y tan frías como el mismo hielo.

---Despierta.--- me ordenó una hermosa voz grave y masculina , digna de los cielos. 

Abrí poco a poco de nuevo mis ojos observando una cabellera parecida al oro, baje un poco más mis ojos y pude notar unos hermosos ojos ámbar. En definitiva no era Jasper , volví a cerrar los ojos intentando recordar de quién se trataba. 

---Ey, no te duermas.--- me ordenó el hombre frente mio

---No lo hago.--- respondí con voz queda y baja, dudaba que me escuchara

---Bien,--- me contestó con diversión--- deja te ayudo a levantarte.--- me avisó mientras me tomaba por los hombros sentandome en lo que ahora sabía que era una camilla de hospital. 

¿Pero qué?.. Estaba en una hermosa oficina con estantes  de cielo a techo atiborrados de libros y me sorprendí ante tal excentricidad.

---¿Sorprendente , no?--- me preguntó el hombre que seguía ayudandome a estar erguida en esa camilla.

---Sí, demasiado. --- afirme sin pena y con asombro , eran una gran fan de los libros, algo que Bella y yo compartíamos. 

Por un lado Isabella era fan de los clásicos , yo como su contraparte era fan de los nuevos artista especializados en la ciencia ficción y los amoríos adolescentes. 

Dejando de lado el innecesario pensamiento, no sabia donde estaba metida en este momento, pero sabía que no me harían daño. El hombre frente a mi era Carlisle Cullen , el suegro de Isabella; ahora que lo recordaba no podía estar más calmada.

---¿Por qué?--- atine a decir preguntado subliminalmente por las acciones de sus hijos adoptivos al haberme traído hasta aquí.

Un pequeño suspiro salió de sus labios pálidos y voltee a verle quedando frente a frente con incomodidad. 

---Ni yo lo sé--- sincero con voz taciturna ---, pero sé que mis hijos no harían nada que nos perjudicaría, confío en ellos.--- finalizó halándome para bajar de la camilla.

Ahora la duda de que si querían desaparecerme o simplemente matarme no cabía en mi, solo esperaba que todo el maltrato valiera la pena. 

Carlisle seguía tomándome de los hombros siendo un apoyo para mis tambaleantes piernas, no quería ser una carga más y gentilmente camine unos pasos dejándole en claro que necesitaba detener sus apoyos.