X

713 113 15
                                    

Gulf cruzó la calle hacia la casa de Mew quien le había dicho que pasaría por él, pero estaba muy nervioso para esperar así que salió antes.

—¿Gulf, me he tardado mucho? —pregunta sorprendido Mew, temeroso de no ir en buen tiempo y haber dejado al castaño esperando.

—No, descuida. Es que me apresure demasiado rápido así que decidí venir por ti —Gulf no pasó desapercibido lo bien que se veía Mew en atuendos menos oscuros y rutinarios cómo lo eran la sudadera. Lleva un abrigo de chaqueta larga gris claro, debajo una jersey cuello alto, lo que definitivamente le quedaba bien al pelinegro.

Mew se aliso su traje que con mucho esfuerzo le costó ponerlo. Aún le costaba asimilar que se veía bien. Las palabras hirientes de Earth aún hacían eco en su mente ya no tan presentes pero sí a lo lejos.

—Te ves hermoso —elogia el castaño, teniendo un rubor del pelinegro que dejó de sentirse abrumado por sus pensamientos ante ese cumplido.

—Gracias.
Mew sonríe y luego recuerda que lleva una bolsita de papel de colores con algo adentro.

—No se que flores te gustan o si eres alérgico a alguna de ellas, pero después de pensarlo por horas compré este pequeño presente —dio con mucho cuidado la bolsita decorada.

Gulf quería llorar de emoción, nadie antes le había llevado un presente y tenía mucho tiempo sin estar en citas, las únicas que tuvo fue con Andrew y con Malee fue más el tipo unión libre jamás salieron a citas porque cuidaban de sus hijos y trabajaban. El aceptó el presente sacando su contenido, era una taza con la firma del elenco de su serie cómica favorita.

—¡Oh por Dios! —al castaño se le cristalizaron los ojos, ¿Cómo conseguiría tal obsequio o como sabría el pelinegro que le gusta coleccionar tazas. Nadie jamás se había fijado tanto en los detalles.

Gulf metió la taza en su lugar y abrazo al pelinegro, amando el obsequio y no solo el valor del presente sino el valor del gran corazón que tenía Mew, tan atento y tan honesto.

Mew amaba ver al castaño tan sonriente y alegre, le llevó una de las tazas, aluciendo que era fan de coleccionarlas porque siempre que veía la cocina tenía en la encimera una que otra con frases o flores artificiales.

Llevó al castaño en su auto, tiene un largo tiempo de no utilizarlo, cuando vivía con Earth el de estatura baja era quien lo manejaba y estando con sus padres prefiria caminar, además no era de salir mucho.

Llegaron a un lugar cómodo donde servían todo tipo de comidas extranjeras y típicas, con degustaciones dulces. El restaurante perfecto para citas, el lugar era famoso siendo visitado por parejas enamoradas, también por celebrar eventos de boda, aniversarios y como no, si toda la decoraciónse basaba en flores ornamentales, acompañado de foquitos brillantes sobre el techo, velas en cada mesa o puestas en caminitos hacia el jardín, con el aroma dulzón a postres y comida que hacía agua la boca.

Los dos hombres se sentaron en un espacio que tenía vista al jardín donde habían más mesas de manteles largos y bien acomodados en fina delicadeza. Había más decoración, pero con flores de casi todo tipo, una bella vista que alimentaba los ojos de cualquiera que lo viese.

—Es un lugar hermoso, jamás había venido aquí, sé de el lugar por las redes sociales —veía Gulf la decoración a su alrededor.

—Tampoco había venido aquí, pero pensé que tal vez te gustaría.

Gulf sonrió, y es que muchas veces ha sonreído pero está vez le acompañaba un tono rojo en sus mejillas y la brillante luz en sus ojos que no se apagaban. Aprecia tanto el interés del pelinegro que quisiera besarlo en esos momentos, pero no cree que sea prudente. Pues está sentado del otro lado frente al pelinegro.

IT'S NOT THINK WHAT YOU  [MewGulf]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora