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Capítulo 118: Selene Aetos

Selene mantiene la cabeza gacha, el té se enfría frente a ella. Su esposo, el amor de su vida y su único compañero durante los últimos 2000 años y más, estaba sentado a su lado, con la mano de ella en la mano de él.

Podía sentir las emociones pasando por su mente, sentir su amor por ella, sentir cuánto la había extrañado. Pero también podía sentir cuánto lo había lastimado.

No había dicho nada, no le preguntó dónde había estado todo este tiempo, por qué no estaba con él. Pero ella podía sentir esas preguntas en su mente. Y ella responderá, aunque él no pronuncie esas palabras en voz alta, ella responderá.

Se merece la explicación, merece saber por qué ella lo abandonó durante casi tres décadas.

Mientras Athreos se frota el dorso de la mano con el pulgar, Selene respira hondo y dice: "Mi situación... mi maldición... estaba empeorando. Año tras año, mes tras mes".

Athreos escucha con calma, pero los movimientos de sus dedos en sus manos se detienen, tenía miedo por ella, ella podía notarlo. Ella continúa después de una pausa de un segundo y dice: "Tan peor que necesitaba tomar un alma cada mes, o arriesgarme a morir... permanentemente. Pero incluso cuando estaba tomando esas almas... podía sentir que mi cordura se desvanecía".

"¿Qué... qué quieres decir?" Athreos pregunta, con voz temblorosa.

Y Selene podía entender eso. Cuando empezó, ella también temía por sí misma. También tenía miedo por él, más que por ella misma.

-Escena retrospectiva-

Había sido un desarrollo repentino, y en absoluto algo que ella hubiera visto venir. Primero, fueron pensamientos intrusivos, que la impulsaron a tomar más almas. Una voz en el fondo de su mente, diciéndole que tome solo un alma más, no le hará daño.

Sabía que era parte de su maldición, pero podía ignorarlo, tal como lo había hecho durante los últimos siglos en los que su maldición había empeorado.

Pero un día, este día, no pudo contenerlo tan fácilmente como antes.

Athreos estaba en la Tierra, visitando a Emma Frost y para comprobar la organización que había establecido para la seguridad de los hijos de muggles y mutantes por igual. Ella había estado visitando a Euphemia Potter, para verificar su salud en lento deterioro en nombre de Athreos.

James y Lily estaban con ella, junto con el pequeño Harry de dos meses. James estaba preocupado por Euphemia, que ahora tenía casi cien años. Y era comprensible. Mia era su única madre, y aunque Selene y Athreos la habían ayudado a criarlo, ella fue quien lo dio a luz, ella fue quien se retiró de su trabajo solo para concentrarse en criarlo.

Ella era su madre.

Después de asegurarse de que su cuerpo y su alma estaban bien, la familia se había retirado al comedor para tomar un té. Sin embargo, mientras bebía té, mientras Selene miraba al pequeño Harry jugar con el cabello rojo de Lily, algo... sucedió.

'Tan... gracioso... tan puro... deberías tomarlo... tomar a la madre también... tan puro...' había dicho la voz que había permanecido casi en la parte posterior de su cabeza, y por una fracción de segundo, Selene había lo consideró.

Había considerado simplemente acercarse, tocar la mejilla de Lily con la palma de la mano, tomar su alma como propia. Había considerado tomar el alma del pequeño Harry también, la pureza del alma del bebé era tan tentadora.

James y Lily no habrían podido detenerla, por supuesto, eran débiles, mortales, y nadie que pudiera luchar contra alguien de su nivel. Habría ganado en segundos, como máximo.