Capitulo 9

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Rhaeliz habia llegando a el pozo de Dragon y se percató que su madre no estaba. Se quedó un rato esperándola y veía que aún no había llegado. Cuando estaba apunto de marcharse observa a Aemond llegar. Lo que hizo que la princesa se diera cuenta de lo que había hecho.

-Me mentiste-le reclama Rhaeliz, cuando el príncipe ya estaba lo suficientemente cerca para escucharla.

-Tenemos que hablar-

-Yo no Tengo nada que hablar contigo-la princesa intenta irse pero el príncipe se detiene.

-Lo siento, siento haberte herido esa noche, siento haber traicionado nuestro pacto. Perdóname - El príncipe abre su corazón. Rhaeliz lo mira fría y sin ninguna expresión, ya que sentía que sus lágrimas prontamente iban a escaparse solas.

-Yo te perdone hace tiempo. Pero eso no significa que vuelva a darte mi amistad-contesta Rhaeliz fríamente. Aemond la sentia distante y tan diferente, y eso le dolía porque el sabía que era su culpa.

-Yo no quiero tu amistad quiero más que eso, siento haberte herido. Pero cuando te vi defendiendo a Luke mi enojo me cegó-la princesa suelta un bufido.

-Yo fui a tu cuarto-repudia con enojo-Fui a tu habitación, a ver cómo se guías, incluso te defendí ante tu padre- la princesa se enojaba aun más cuando no podía controlar sus lágrimas

-Lo se..-Rhaeliz lo interrumpe.

-No sabes nada Aemond. Te dije que te amaba-le grita furiosa-Y que hiciste dime? Me mandaste a la mierda. Me llamaste maldita bastarda-Aemond intenta limpiar las lagrimas de la princesa pero esta quita la mano del príncipe con furia. -Ni una carta todos estos años- la voz de la princesa se calma un poco-Yo te amaba Aemond, te defendía de todos, mi corazón era completamente tuyo- Rhaeliz no controlaba sus lágrimas, y cuando hablaba su voz se entrecortaba. No sabía porque actuaba de esa manera, ni porque lloraba. Pero al tenerlo de frente, sintió esa niña que siempre quería protegerlo, y amarlo.

-Yo te envié muchas cartas, suplicando tu perdón, fui un tonto en tratarte así-Contesta el príncipe. Pero Rhaeliz simplemente no le creía.-te casaste con Jace?-pregunta, lo que provoca que la princesa lo mira directo a los ojos. Sin decir nada, el príncipe pasó su manos por el rostro de la princesa, y está no apartó su mano esta vez. Ambos estaban agitados por el argumento pero la tensión que había entre ambos era demasiado grande. Sin pensarlo Aemond la toma por la nuca y la atrae hacia el, inyectándole un beso. Rhaeliz no puso resistencia y se dejo llevar. El beso nubló todos sus pensamiento. Era una beso lleno de pasión, y con mucho deseo. El príncipe agarró los muslos de la princesa, haciendo que esta rodeada sus piernas en la cintura del príncipe. Sin apartar el beso, Aemond pega a Rhaeliz de una de las paredes.

-Te deseo tanto-decía el príncipe, mientras continuaba su beso. Unos pasos hicieron que estos jóvenes se separan de golpe. Mientras la princesa se acomodaba la falda su tío Daemon aparece desde las sobras.

-Que demonios pasa aquí-Daemon le reclama a su hija.

-Nada, solo resbale-mienta Rhaeliz.

-Ve a los aposentos de tu madre, ella te espera allí- Rhaeliz acierte, y se marcha casi corriendo del lugar. Sabía que su tío no era tanto, y era obvio que había pasado algo.

-Alejate de ella, o conocerás mi espada-Daemon amenaza a el príncipe.

-ella se convertirá en mi esposa-Al escuchar lo que Aemond acaba de decir. Daemon suleta un bufido sin gracia.

-Alejate de ella-Amenaza Daemon y se marcha.

Rhaeliz llega a los aposentos de su madre, la cual se encontraba con sus dos hermano pequeños Aegon y Viserys. Su madre la mira un poco preocupada ya que la princesa tenía su cabello algo revuelto y su traje más acomodado.

-Que te sucedió-pregunta Rhaenyra. Dándole a uno de sus hijos a la doncella.

-Me he caído-miente.

La puerta de la habitación de su madre se abre, entrando el príncipe Daemon por la puerta.

-Te lo advertí Rhaeliz, te dije que lejos de...-Rhaeliz interrumpe a Daemon.

-Me caí, y el me estaba ayudado-vuelve a mentir la princesa-Y si pasara algo entre nosotros, no es nada ya soy una adulta, y tú no eres nadie para reclamarme-

-Esta actitud a que viene?-Rhaeliz suerta un bufido sin gracia y se acerca desafiante a Daemon.-por un simple capricho por un príncipe, pensaba que eras mejor que eso-

-he pasado 6 años intentando cumplir con todas tus expectativas, me he convertido en una de las mejores guerras de los 7 reinos, que más quieres de mi-

-Llevanse a los niños-ordena Rhaenyra a las doncellas.

-Que no le habrás las piernas a el primero que se te cruce de frente-replica el príncipe. Rhaenyra solo miraba la discusión entre padre e hija. No se entrometía debido a que conocía el carácter de ambos.

-Tu no eres mi padre, y no eres quien para decidir por mi-

-Eres mi hija y exijo tu respeto!-Grita Daemon enojado por la actitud de su hija.

-Mi padre era Ser Leanor, y está muerto. Tu solo eres el esposo de mi madre un canalla que solo busca centarse en el trono de hierro- Rhaeliz no entendí que lo que decía Daemon era real.

-Dile Rhaenyra, quien es su verdadero padre-Dice Daemon mirando a su esposa. La mirada de Rhaeliz se posa también en su madre.

-Daemon No!-

-De que habla madre-pregunta la princesa.

-Vamos dile, o le digo yo-Rhaenyra se queda mirando a sus hija.

-Rhaeliz-la futura reina buscaba las palabras adecuadas para confesarle a su hija la verdad-Daemon es tu verdadero padre-la princesa sintió como si le hubieran lanzado un balde de agua fría. Ahora lo entendía todo, como Daemon la trataba y la protegía como una hija.

-Crees que por decirme que soy su hija, van a manipularme-suelta un bufido-Mi nombre es Rhaeliz Valeryon hija de ser Leanor -sin decir nada más Rhaeliz se marcha hecha furia de la habitación. La princesa sentía que le faltaba el aire.

La princesa caminaba por los pasillo, necesitaba salir. Y iba directamente a buscar a su dragón el cual estaba en el pozo. Pero en el camino se encontró con Aemond. Ambos hicieron contacto visual, por unos segundos y Rhaeliz sin pensarlo corrió donde el, y lo abrazó. Aemond siempre fue ese lugar seguro que Rhaeliz buscaba cuando estaba triste. Este se sorprendió por tal acto y respondió a el abrazo.

-Lo siento no debí-dice la princesa mientras se separa de Aemond.

-Quieres salir de aquí?-

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