☀︎︎𝐴𝑙𝑚𝑎 𝐷𝑖𝑛𝑎𝑚𝑖𝑡𝑎☀︎︎| Menudo/Evolución

2¿?

-¡Sueltalo!-El chico de ojos verdes lo empujó-¡No!, ¿Para qué?-Cuestionó el chico moreno.-¡Son cosas personales Robby!, Suéltalo.-Ray reclamaba por su libreta.-¿Qué tienes aquí?-Dijo Robby en  tono burlón.-¡Eso no te importa!

-El chico moreno rió.-¿Y si no quiero?-Reyes lo miró enfurecido.-Te cortaré las cejas mientras duermes, uniceja de mierda.-Frunció el ceño ante tal respuesta.-¡Cállate!-Massó soltó una carcajada.-¿Ray, acaso tienes tus fantasías sexuales ahí?-Reyes lo empujó.-¡Por Dios Charlie!, ¡No!

Los muchachos discutían por una libreta de Ray que para él era privada, demasiada privada, como un diario intimo. Robby y Charlie se reían de Ray porque "esas cosas no son de hombres", eso realmente enfurecía al adolescente, más el hecho de que no le devolvieran algo tan privado. Era un miércoles, los miércoles tenían doble turno y ya estaba terminando su descanso, pero las risas por parte de Robby y Charlie se desprendían todo el tiempo y no mostraban signos de querer parar, por su parte, Ray estaba avergonzado, pues allí tenía cosas demasiadas privadas, no quería que las vieran, se sentía invadido y si las llegaran a leer, se sentiría muy humillado, pues, Ray en esa libreta compartía sus más grandes secretos y sentimientos, sería su perdición si leían solo una página.

...

-Entonces.. ¿Serías una suricata?-Preguntó Ricky mientras se pasaba una pelotita con Roy, chico el cuál asintió sonriente.-Me gustan mucho las suricatas, son muy bonitas y tiernas.-Le dedicó una linda sonrisa.-¿Y tú Joselo?, ¿Qué animal serías?Preguntó Ricky mirando al coreógrafo.-No lo sé, me gustan todos los animales.-Hizo una breve pausa pero fué interrumpido por unos gritos provenientes de la habitación de Ray.

-¡Dame!, ¡Ya basta!, de verdad ya basta.-Ray había empujado a Robby contra una mesa.-¡Ray!, ¿Qué estás haciendo?-Apareció de inmediato el coreógrafo mientras que detrás de él Ricky y Roy observaban con curiosidad-¡No me quieren devolver mi libreta!, son realmente molestos.-Reprochó Ray.-¡No quiere mostrar lo que hay en su libreta!-Se quejó Robby.-¡Solo quiero ver!-El hombre suspiró cansado.-Robby, es su privacidad, respeta eso, a tí no te gustaría que revisen tus cosas sin permiso.-Habló tratando de mantener todo bajo control.-Por favor devuelve la libreta.

-Reprochó Robby.-No, no quiero.-El hombre frunció el ceño.-No me hagas llamar a Edgardo, sabes que él es de enojarse rápido.-Abrió y cerró la mano en señal de que devolviera la libreta.-¿Por qué tanto lío por una libreta?, Ni que tuviera la receta de la Coca Cola.-Rió el chico en un tono burlón mientras entregaba la libreta.-Son cosas privadas Robby, no te entrometas.-dijo Ray mientras arrebataba su libreta de las manos del coreografo.-¡Bueno ya!-Exclamó Joselo.-Basta de tanta charla, a ensayar.
Los chicos hicieron una mueca de cansancio y caminaron hasta el salón de ensayos mientras soltaban quejas.

...

El ritmo de "Persecución" se oía en la sala mientras los chicos hacían la coreografía ya cansados, pues la habían repetido varias veces. De pronto las risas llenaron la sala cuándo, en un giro, Robby había caído.-¡AUCH!-Exclamó el chico herido.-Charlie soltó una carcajada..-¿Te fisuraste el ano Robby?-Dijo el de rulos aguantando la risa.-¡No sé!, !¿Cómo se supone que sepa si se me fisura el ano!?-Habló de mala manera.-¡¿Dónde te duele Robby?!-Preguntó preocupado Joselo.-Aquí.-Señaló su brazo.-¿Qué es fisurarse el ano?-Preguntó inocentemente el pequeño Ricky.-Es cuando...

-Charlie no pudo seguir ya que una voz lo interrumpió.-No es nada Ricky, no le hagas caso.-Dijo Ray.-Yo no quiero fisurarme el ano.-Decía Roy mientras abrazaba sus piernas.-Tranquilo Roy, eso no pasará.-Lo tranquilizó el chico de ojos verdes.-O tal vez si, no lo sabemos.- Charlie apareció detrás del chico asustado con una malévola y burlona sonrisa.-¡AAAAAAH!-El pobre Roy salió corriendo, Charlie había logrado asustarlo.-¡JAJAJAJA!-Rió fuertemente Charlie.-¡Deja de reírte!, Mi brazo me está doliendo demasiado.-El coreógrafo se preocupó.-¿Mucho?Robby asintió.-¿Te fisuraste el ano?-Preguntó Ricky.-¡NO!, ¡Ya cállate!-El pequeño hizo una mueca de tristeza.-Oh, lo siento.
El coreógrafo tuvo que llamar a un doctor para ver el problema de Robby.