Dos mundos distintos, en una época de guerra.
Un soldado que vuelve a perder a su clan... Y una responsabilidad muy grande para la heredera.
Luz Noceda Liang, hija del guerrero Sub-Zero, gran maestro de los Lin Kuei. Ella fue obligada a abandonar la...
Oscuridad, sensación de pesadez, punzadas de dolor; eso era lo que sentía Luz en ese momento.
Sus ojos se sentían pensados, no podía abrirlos por más que quisiera; su cuerpo y sus sentidos le permitían sentir o percibir lo que pasaba a su alrededor. Sentía que estaba sobre la cama de antes, pero está vez, tenía la agradable satisfacción del frío en su cuerpo, no tenía manta encima por lo que puede aprovechar eso a su favor para recuperarse un poco; al intentarlo, podía mover su cuerpo, probó un poco los brazos y después las piernas, pero se sentía extrañamente pesados... no estaba atada a nada, ¿Entonces por qué sentía pesadez en todo su cuerpo?; podía escuchar pasos a su alrededor y uno que otro murmullo pero no distinguía las voces, pero sabía que no estaba a salvó en aquel lugar, ni mucho menos estaba sola ahí. Sus instintos le advierten del peligro.
-Sigo sin entender, ¿Por qué la quieres tanto como tú presa?- habla una voz femenina.
-No sé cómo explicarlo querida Tanya... Aunque no solo yo la quiero en nuestro bando, mi madre también ve ese algo en ella...- habla una voz familiar...-Algo que nos hace desear extraer de ella, ¿Será su voluntad?, ¿Su alma?, ¿Su devoción?, ¿Su fuerza?, ¿Su linaje?...-suelta una pequeña risa-...Yo ya quiero saber que guarda dentro de ese frágil cuerpo...
Esa última voz la reconocí, con algo de esfuerzo empecé a abrir mis ojos, aunque la claridad de la habitación me molestaba mucho, no fue impedimento para que viera mi entorno... Y tengo que admitir que me sobresalté un poco al ver quién tenía al frente.
Luz:¡¡WAAAHH!! *se cae de la cama por el susto*
Mileena:Veo que has despertado por fin, pequeña Lin Kuei~ *suelta una pequeña risa*
Luz:*Se asusta ligeramente teniendo que cubrir un poco su nariz mientras retrocede un poco de dónde estaba* ¿¡QUÉ DEMONIOS HACES AQUÍ, VESTIDA DE ESA FORMA MILEENA?! *Desvía la mirada avergonzada*...[¿¡ES QUE ESTA LOCA NO SIENTE VERGÜENZA DE ESTAR VESTIDA ASÍ?!]...
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Ella estaba cubierta de sangre, no quisiera saber de quién, pero de lo que hace que mi corazón y respiración estén fuera de lo normal es esa ropa que lleva. Maldita sea soy demasiado joven para presenciar estás cosas.
???:*Mira de pies a cabeza a Luz*
Mileena:Un pajarito me dijo que mi madre te traería para ser su mascota nueva...yo simplemente quise pasar a saludar *de un movimiento rápido se pone sobre ella*...Veo recuerdos nuevos~ *se refería a sus cicatrices*
Luz:*algo sonrojada desvía la mirada y intenta apartarla*...¡Oye, oye, Oye, quítate de encima!...
Mileena se había puesto sobre la joven morena, ella intentaba congelar sus brazos para que se alejara y retomará su distancia, pero nuevamente sintió dolor en sus brazos al intentarlo; cosa que la hace caer al suelo por completo, todo su cuerpo se paralizó casi al instante, mientras que una horrible sensación electroshock la invadió por todo el cuerpo, era como si su propio poder se negara a obedecer sus intentos..."talento sin conocimiento no sirve".
