Quería remediar las cosas, pero no, prefería no decir ni hacer nada para evitar empeorar las cosas, y tenía tanta desesperación, todo iba de mal en peor; el estrés me hizo empezar a fumar, me convertí en un maníaco, pero siendo sincero me gustaba el sabor.
-joder padre, te envíciate.-dijo un día Ángela preocupada.
-ya lo sé, pero es mi problema.-respondí mientras tiraba el humo de mi boca.
-has aprendido algo.-dijo ella mientras aplaudía sarcásticamente.
Ella sonrió y se fue a su habitación, era fin de semana, y al ver esa sonrisa me acorde de algo que debía hacer si o si, entonces con la esperanza de que me tratara bien, después de esa sonrisa, al pedirle hablar con ella.
-hija ¿podemos hablar?-le pedí con miedo.
Ella se quitó los cascos, puso pausa al video que estaba viendo y al parecer no me había escuchado, pero sabía que le estaba haciendo una pregunta.
-¿eh? Perdóname, no te escuché.-dijo riéndose.
-no pasa nada, solamente quería que habláramos.
-sí, claro, solo dime.-dijo tiernamente.
Mi hija estaba mirándome como si nunca hubiéramos discutido aquel día en la cocina, era tierna y quería que así permaneciera. Iba a hablar de Katherine, y me di cuenta que sería un error fatal; cambie de tema y le dije algo sobre el trabajo, que del todo mentira no era, vale, sí, pero de hecho me ayudó un montón.
-bueno, es que necesito ideas para publicitar la empresa, pero no me ocurre nada ¿me ayudas?-pedí yo.
-¡claro! Es más, tú el otro día decías que querías que fuéramos más unidos, pues yo te ayudo siempre que te pidan ideas.-ofreció ella.
Acepté orgulloso, y así fue, siempre que lo necesitaba le pedía ayuda, y la verdad es que sus ideas molaban mucho, me encantaban, no solamente a mí, a mi jefe también, pero tenía que saber que había puesto a mi hija tan animada, dispuesta y alegre; al principio sospeche de ese youtuber, pero luego me di cuenta que no, ese chico solamente la hacía reír, había algo que la ponía alegre, respetuosa y dispuesta. Generalmente era más respetuosa cuando llegaba del CQ, y lo iba a descubrir cueste lo que cueste.
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yo siempre estaré a tu lado
RandomPadre e hija que van por caminos iguales, pero a la vez tan diferentes, y aún así se darán cuenta de algo que sabían, pero no se habían dado cuenta ¿te animas a descubrirlo?