CAMINO REAL PARTE 2

Capítulo 232 - Mostrar debilidad

Era justo después del amanecer cuando Liu Cong salió de su tienda con la cortina levantada. Frente a él, la ciudad seguía en pie. Tras dos días de ataque, el camino desde el campamento hasta la muralla estaba sembrado de sangre, y muchos carros y carros de combate habían caído al suelo. La madera carbonizada parecía esqueletos dentados y, desde la distancia, era como si pudiera oír los gritos de los soldados bajo los carros mientras ardían ese día.

Liu Cong echó un vistazo y luego dirigió su atención a la ciudad. A pesar de la orden de masacrar la ciudad, este pequeño Gao Du seguía siendo más difícil de atacar de lo esperado.

Las zanjas debajo de la ciudad se habían rellenado un poco, y los camiones escalera podían pasar por debajo de la ciudad, pero por mucho que subieran, nadie podía tomar la ciudad. También hubo de tres a cinco batallas nocturnas, en su mayoría fingidas, pero algunas reales. Habría agotado a cualquier defensor. Pero aun así, la ciudad permaneció como estaba, incluso antes de que las ballestas se agotaran.

¿Cuántos soldados tenía Gao Du? A veces, el propio Liu Cong se preguntaba cómo podría haber resistido la ciudad un asalto semejante si no hubiera habido entre 5.000 y 6.000 soldados en ella. ¿Pero cuántos soldados y caballos tenía Shangdang en total?

Extendiendo la mano para frotar sus mejillas, que estaban congeladas por la brisa de la mañana, Liu Cong ordenó: "¡Da la orden, después del desayuno, continúa el ataque!

No le importaba cuántos soldados había en Gao Du. Estos días, los exploradores a caballo no se detuvieron ni un momento, vigilando constantemente a la Casa Liang que estaba junto a ellos, y al Clan Hyun que estaba más lejos. Sólo para ver qué lado haría un movimiento. Una vez que lo hagan, los jinetes de élite de Han entrarán inmediatamente en batalla y los tomarán por sorpresa. Las batallas campales, no muy diferentes a los asedios, son la especialidad de los Xiongnu, y él está ansioso por que los soldados de Shangtang acobardados en sus caparazones se muestren lo antes posible.

Pero no había nada malo en ignorar realmente a Gao Du. El paso de Tianjing había sido tomado, y todo el camino hacia el sur a lo largo del Yanggou Ban era el interior de Hanoi. Si el ejército occidental ya ha llegado a Hanoi, y si los soldados de Shang Dang realmente no aparecen, podemos dejar algunos hombres para seguir atacando la ciudad y mantener el camino de vuelta, y el ejército entrará directamente en el desfiladero de Taihang.

En cuanto le llegara la noticia de la apertura del desfiladero de Taihang, sería el momento de dirigir sus tropas hacia el sur.

Pero con la batalla tan feroz, y el paso de Tianjing en manos extranjeras, no creía que los defensores de Shangdang pudieran quedarse quietos. en estos dos días, el otro bando se verá obligado a enviar tropas para rescatar a Gao Du.

Ese sería el encuentro frontal que había estado esperando. ¡Una batalla que aplastaría al ejército de Shang Dang de una vez por todas!

Tras echar otra mirada a la pared, que había sido agujereada por el carro de los cañones, Liu Cong resopló con frialdad y se dio la vuelta para volver a su tienda.

*

Una carretera de montaña serpentea por la cima de un alto acantilado y un profundo barranco. El desfiladero sólo tiene tres pasos de ancho, por lo que, aunque se camine un poco más rápido, se corre el peligro de caer en el arroyo de la montaña. Como dice el viejo refrán, "el peligro del intestino de la oveja está decidido, y la boca de Taihang está tapada", lo que significa que este es un camino clave para los soldados que controlan la garganta de la división y la ciudad.

Sin embargo, en este momento, un grupo de soldados con armadura se apresura por el camino hacia Hanoi. Ayer mismo, el paso de Tianjing, que había estado en manos de los soldados de Shangtang, fue combatido por los Xiongnu con una mano diferente.