Capítulo 2

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Noviembre 2022

Las siguientes semanas se basaron en partidos amistosos y sin importancia en los alrededores, en los que el equipo Español fue acumulando pequeñas victorias, acercándose cada vez más a los octavos de final del mundial.

Todos esos días fueron increíbles para todos los jugadores, ya que eran la oportunidad perfecta para relacionarse más entre ellos, y llegarse a conocer aún más, o entablar amistades que hasta entonces no había habido posibilidad de hacer.

Los más jóvenes de la selección fueron los que más disfrutaron de esos días, jugando junto a jugadores que solían ser sus ídolos. Gavi no quería admitirlo en voz alta, pero estaba seguro de que la mitad de su equipo estaba en el viejo álbum de cromos que tenía guardado en su habitación.

Para Gavi este proceso no fue tan duro como lo esperaba, resultó ser que la selección de este año en general era bastante animada y relajada, y aunque no podían permitirse retrasarse en la preparación del Mundial, ninguno se tomaba muy a pecho la presión. Esto hizo que el joven se sintiera más a gusto con sus compañeros, sin tener encima el peso de la presión de tener que demostrar nada.

Incluso el entrenador tenía sentido del humor, y Gavi sintió que había tenido mucha suerte al poder tener la oportunidad de tener el sentimiento de un equipo unido.

Al final del mes, todo el equipo estaba más unido que nunca, y Gavi agradecía las amistades que había fortalecido en ese tiempo. No podía imaginarse por ejemplo un entrenamiento sin las bromas constantes de Nico y Ansu, o las sesiones de gimnasio sin Ferran, el equipo riéndose de los videos de Luis Enrique o los viajes de vuelta a casa en el coche de Pedri.

Su relación con Pedri fue otra de las cosas que se hizo mejor en ese tiempo. Por supuesto que se llevaba bien con el de antes, era su mejor amigo en el campo, y fuera de ello seguramente; pero todo siempre daba vueltas alrededor del fútbol.
Claro que ahora también era así en su mayoría, y si quisiera siempre podría invitar al mayor a hacer algún plan con él. Pero la situación actual había ameritado más horas junto a él, largas estancias en pequeños hoteles de ciudades no tan conocidas y largos paseos en coche; Gavi no podría estar más contento.

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El tiempo corrió rápidamente, y antes de que pudiese decir todo lo que había hecho en ese mes, era mediados de Noviembre y estaba a punto de volar a Qatar.

-¿No se te habrán olvidado las zapatillas verdad? -Gavi se giró al escuchar la voz de su amigo a sus espaldas, que llegaba cargado con una maleta enorme.

-Por lo que veo, aunque se me olvidaran, seguro que llevas algún par más en esa maleta. -Gavi no pudo evitar reírse al ver la cara indignada que puso Nico ante su respuesta.

-Oye, que vosotros seáis unas bestias sin higiene no significa que yo no pueda ser responsable -atacó de vuelta su compañero -además, con el calor que hará, no pienso repetir ni una camiseta.

Su conversación fue interrumpida cuando la puerta de la sala se abrió otra vez para dar paso al entrenador y varios jugadores que venían por atrás. Habían quedado a las 10:00 de la mañana para coger un bus juntos al aeropuerto, todavía eran 09:45.

Él nunca había sido de esas personas puntuales que llegan mucho antes, pero ni él ni sus padres habían estado del todo tranquilos hasta saber que Gavi había llegado a donde tenía que llegar.

-Hombre pero si están aquí los pequeños polluelos! -animó Luis Enrique al verlos.

En pocos minutos la sala se fue llenando con todos los jugadores y personas que viajaban con ellos hasta Medio Oriente. Pedri fue uno de los últimos en llegar, con una mochila en un hombro y tirando de una pequeña maleta. Se acercó directamente a donde ellos estaban, poniendo una mano en su hombro y sacudiendo suavemente por la emoción.

No pites el final (Pedri & Gavi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora