𝐑𝐨𝐨𝐦𝐦𝐚𝐭𝐞𝐬 | 𝓛𝓪𝓻𝓲𝓼𝓼𝓪 𝓦𝓮𝓮𝓶𝓼 𝓧 𝓵𝓮𝓬𝓽𝓸𝓻𝓪

Capitulo 5

_________________________________________𝓐𝓬𝓵𝓪𝓻𝓪𝓬𝓲𝓸𝓷𝓮𝓼
𝓣/𝓝: 𝓣𝓾 𝓷𝓸𝓶𝓫𝓻𝓮
𝓣/𝓐: 𝓣𝓾 𝓪𝓹𝓮𝓵𝓵𝓲𝓭𝓸
𝓣/𝓐𝓟:𝓣𝓾 𝓪𝓹𝓸𝓭𝓸
_________________________________________

—¿𝓔𝓷 𝓺𝓾𝓮 𝓶𝓲𝓮𝓻𝓭𝓪 𝓶𝓮 𝓶𝓮𝓽𝓲?

Cuando llegue a mi casa inmediatamente fui hacía la bodega de vinos, realmente necesitaba una copa.

—¿En qué demonios estaba pensando?

Me sirvo una copa de vino y la bebo de solo un trago.

—Claramente no estaba pensando.

Sirvo otra copa y la bebo rápidamente, era más conveniente simplemente beber de la botella pero no me gustaba, se veía horrible y arruinaba mi lápiz labial.

Después de varias copas de vino encima ya podía sentir el efecto, ya me sentía más cansada y me reía por cualquier cosa que decía mi mente clara señal de embriaguez o esquizofrenia, prefiero pensar de que es la primera opción.

Me siento en el sofá y bebo el último sorbo de vino que queda en la botella y cierro lo ojos, cuando hago esto los recuerdos me golpean de la manera más dolorosa.

—¿Por qué me hiciste esto Larissa? ¿Acaso no fuí lo suficientemente buena para ti?

Me acurrucó en el sofá y comienzo a llorar en silencio.

Si alguien me viera en este momento sería el fin de su vida, nadie más que yo tiene el derecho de verme de una forma tan vulnerable.

Casi sin darme cuenta me dormí, a la mañana siguiente me desperté gracias a al sonido de una copa que se rompió contra el piso, me levante rápidamente y veo a mi gato encima de la mesa donde ayer había dejado la copa de vino.

Sonrió un poco y me acerco a el, acaricio sus cabeza y continuo con su lomo, estoy así por un rato hasta que recuerdo que tengo que ir a preparar las maletas, agradezco de ser una vampiro ya que de no ser por eso, la resaca me estaría matando, camino dentro de mi habitación y pongo toda mi ropa en la maleta, mientras que las demás cosas como artículos de aseo personal y cargadores los puse en un bolso a parte, me asegure de tener todo guardado y meto mis maletas en el auto, cuando ya esta todo a dentro, pongo a Lucifer mi gato en el auto, el ya esta acostumbrado a viajar en el auto, salimos constantemente a recorrer el mundo juntos, el es mi único y fiel compañero, se que nunca me traicionaría.

El se acurruca en el asiento del copiloto y pongo a Lady Gaga en la radio, es la mejor para viajes largos y nadie lo puede negar.

Despues de varías horas de viaje y muchas pausas ya que Lucifer pedía bajarse para ir al baño cada media hora, por fin llegamos a Nunca más.

Cuando llegue Weems estaba en la puerta de la academia esperándome y suspire, no estaba entre mis planes que ella me estuviera esperando.

Comencé a sacar mis maletas y ella se me acerca.

—Buenos días T/N, ¿Como estuvo el viaje? - Ella preguntó demasiado feliz para ser tan temprano.
—Estuvo bien, gracias por preocuparse.
—Déjame ayudarte con las maletas.
—No, estoy bien, gracias.

Le pongo a Lucifer su correa para que no se sienta desorientado y le abro la puerta, el se baja del auto y mira a todos lados.

—¿Este es tu gato?
—No, es una ilusión señora Weems.

Ella pone los ojos en blanco y trata de acariciar a Lucifer, el se aleja rápidamente y le muestra los dientes y sus garras.

Sonrió con satisfacción y acaricio su cabeza.

—Ese es mi buen chico.
—Se parece a ti. - Ella dice con tranquilidad.
—¿Disculpe?
—Sí, cuando no confía en alguien esta a la defensiva.
—No es cierto, solo que a el no le gusta usted señora Weems, Lucifer es un gato muy amigable y amoroso al igual que yo.
—Si tu lo dices, tiene que ser cierto.

Ella se ríe y agarra una de mis malesta mientras comienza a caminar hacia dentro de la academia, recojo mi bolso mientras comienzo a caminar detrás de ella y Lucifer me sigue.

Cuando ella abre la puerta de la que ahora va a ser mi habitación entro en ella y miro a mi alrededor, hay dos camas y dos escritorios, por lo menos podré dormir sola.

—¿Te gusta?
—Supongo que no puedo quejarme.

Me encojo de hombros y la miro.

—¿Donde puedo guardar mis cosas?
—Oh claro, en la puerta de por ahí esta tu closet, lo único que tendremos que compartir es el baño, eso no te molesta ¿verdad?