Era un nuevo día en el País del Fuego, el sol comenzaba a alzarse en el cielo despejado marcando el inicio de lo que prometía ser un soleado y maravilloso día para los habitantes de la Aldea de la Hoja. Avanzando sin prisa los miembros del equipo 7 ya podían ver las grandes puertas principales de su aldea, su hogar, al fin habían regresado, luego de cruzarlas los Shinobi pasaron por el registro para confirmar oficialmente su llegada y al terminar el Sensei le habló a sus estudiantes.
– Bueno hemos llegado, normalmente en éste momento nosotros cuatro tendríamos que ir a la oficina del Hokage para dar nuestro reporte de la misión – Informó – Pero, considerando todos los problemas por los que pasamos y el tiempo que tardamos en volver creó que lo más justo es que ustedes se vayan, de una vez, a sus casas yo me encargaré de dar el reporte tómense éstos días para descansar, se lo han ganado – Ofreció con su característica, y patentada, sonrisa de ojo.
– Hai Sensei – Dijeron los Genin al unísono felices y procedieron a retirarse, cada quién por su lado.
El Jounin observó como sus estudiantes se alejaban hasta que los perdió de vista, sólo entonces procedió a marcharse también mediante un Jutsu de Cuerpo Parpadeante.
Con Kakashi, oficina del Hokage.
En el centro de la aldea se encontraba la Torre del Hokage y en la casi cima de esta estaba la oficina del mencionado líder. En éstos momentos el Cuarto Hokage, Minato Senju, se encontraba sentado en su silla frente a su escritorio revisando el papeleo diario que siempre tenía que atender desde que asumió el puesto, cabe destacar que al rededor habían varios clones de sombra que le estaban ayudando.
– No te había dicho que usaras la puerta – Mencionó el Hokage sin levantar la vista de su trabajo.
El hombre rubio le había hablado a su antiguo aprendiz quién acababa de entrar por la ventana.
– ¿En serio Sensei?, no lo recuerdo – Respondió el peli plateado haciéndose el tonto.
– Tengo que admitir Kakashi que está vez te haz superado – Dijo el oji azul levantando su cara y dándole al susodicho una mirada mortalmente sería.
– ¿Enserio? – Cuestionó confundido el Ninja Copia.
– Por supuesto, mira que tardar más de un mes en completar una misión que debía durar, como máximo, unas dos semanas – Respondió el Hokage con el ceño fruncido en evidente molestia – Pero la parte que más me sorprendió del informe que me enviaste anteriormente fue en la que, a pesar de mencionar que la dificultad de la misión había escalado a una de nivel A, tú no solicitaste refuerzos alegando que tú y tu equipo eran más que suficientes para lidiar con la situación, ¡¿me lo puedes explicar?! – Exijio el disgustado hombre.
– Pues que le puedo decir Sensei – Comenzó el oji mixto rascándose la nuca en un claro gesto, y con un tono de voz, que hiban entre la vergüenza y los nervios – Tuve la corazonada de que no sería necesario mandar a más activos para poder completar con éxito la misión y tal parece que tenía razón, después de todo mis corazonadas siempre terminan de lujo – Dijo el Jounin pero repentinamente el mencionado se paralizó al sentir el instinto asesinó de su superior, y también de sus clones los cuales ahora lo miraban mal aumentando su ya de por sí grande nerviosismo.
– ¡¿Me estás diciendo que expusiste a tu equipo, un trío de Genin que hace no mucho estaban aún en la academia, a una situación peligrosa y potencialmente mortal y no solicitaste los obviamente necesarios refuerzos sólo porque tuviste una "corazonada" de que todo saldría bien al final?! – Cuestionó el ahora muy molesto Kage.
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El Hijo del Demonio y la Diosa (En Pausa)
FanficQue hubiera pasado si Meliodas y Elizabeth, pero los Meliodas y Elizabeth de hace 3 mil años, tenían un hijo y que para protegerlo de sus padres lo enviarán a otro mundo, más específicamente al Mundo Ninja. Descubre la historia de un ser que cambió...