Capítulo 7: Este Tío Está Loco

3.6K 164 63
                                    

- ¿Tú flipas o es que tus padres son primos?

Él frunce el ceño, ofendido.

- ¿Y eso a qué viene?

- ¿Qué dices de la selección, flipado?

- ¡Pero tampoco te pongas así! - Se queja haciendo aspavientos con las manos.

Me pongo en pie, nerviosa y bastante ansiosa.

- Tienes diez segundos para explicarte - declaro cruzándome de brazos.

- Vale... Ehm... Es un secreto aún, pero estoy seleccionado para el mundial - murmura aguantando la emoción.

- ¿Tú al mundial? - Me río sin poder evitarlo.

- Gracias por tus ánimos y confianza - dice con claro sarcasmo y un tono dolido que me hace gracia.

- No lo digo por ti, lo digo por mi padre - sonrío al imaginarlo cabreado. - No le hará gracia ver a un culé en la selección.

- Pues cuando vea al resto... - susurra sonriendo.

Yo cierro los ojos y suspiro, concentrándome.

- A ver, centrémonos. ¿Qué tiene que ver la selección en todo esto? - Pregunto más calmada.

- Para tu trabajo. Puedo conseguir que los conozcas. Más... ¿Testimonios? - Se encoge de hombros y yo suspiro de nuevo.

- Pablo, ni siquiera sé si realmente pueda hacer un trabajo bien con ese tema. Primero tengo que planearlo y enseñárselo a mi tutor para que me diga si continuarlo o no - me encojo de hombros. - Y tampoco quiero aprovecharme de ti. Además... no te conozco - añado mordiéndome la cara interior de la mejilla.

Él no dice nada y me mira en silencio. Su expresión es neutra, podría decirse que pensativa. Como si estuviese buscando un motivo para salirse con la suya, alguna respuesta elocuente que lo salve de la situación.

- Esta puede ser la ocasión de que me conozcas - propone entonces.

- ¿Y si no quiero hacerlo? - Le reto con seriedad.

- Los dos sabemos que quieres - replica con fanfarronería.

- No, Pablo, yo quería follar contigo en aquella discoteca y no volver a verte - digo con más crueldad de la que pretendía. - No quería que me ayudaras a hacer un trabajo y que me presentases a toda la selección como en un cuento de hadas o en uno de esos fanfics malos de Wattpad.

- ¿Y entonces por qué sigues aquí? ¿Por qué has seguido con esto?

Su pregunta me deja un poco fuera de juego. Eso quisiera saber yo. ¿Por qué me comprometo con él más de lo que normalmente haría? ¿Por qué me ilusionaba tanto pensar en trabajar con él? Esto sólo sería físico y se me está escapando de las manos.

- Porque eres simpático - miento finalmente.

La realidad es que no tengo un motivo. Y él lo sabe.

- Si no quieres que te ayude, vale - se rinde finalmente. - Pero no me marees más.

- ¿Marearte? - Esta vez la que frunce el ceño soy yo.

- ¡Sí! No sé qué quieres de mí.

- ¡Nada! No quiero nada.

Me mira con sus ojazos marrones y detecto un atisbo de dolor en ellos, como si realmente le importase lo que una chica más opine o diga.

- Pues ya está, ¿no? - Bufa levantándose. - Vámonos.

Empieza a regresar sobre nuestros pasos y yo miro lo que nos rodea. Aquí es el único lugar donde podremos hablar tranquilos, lo sé, así que aclaro mis ideas y me pellizco el puente de la nariz. ¿En qué líos me meto yo sola?

Imprudente // Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora