Estaban mirando algo en el cielo y no pensaron que eso sería el inicio de todo.
Definitivamente, encontrarse no estaba en sus planes y mucho menos imaginaron que aquel sentimiento que experimentaron al verse sin previo aviso se repetiría una y otra...
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"No tiembla la luz de las estrellas. Tiembla nuestra mirada, sabedora del enorme esfuerzo que esa luz ha realizado por hacerse ver"
—Lorenzo Oliván
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—Así que llegué antes para sorprender a mi hija y la sorprendida terminé siendo yo —suspiró.
—Lo siento...
Ambos jóvenes se encontraban sentados en el mueble de la sala de la fémina, mientras la madre de esta recapitulaba la situación.
—Me alegro de que te arrepientas —la miró desde lo alto cruzada de brazos— ¿Cómo es posible que tengas novio y no se lo hayas dicho a tu madre? ¡A tu madre!—dramatizó para luego ubicarse en el sitio libre al lado de Shousuke quien, al igual que __________ se encontraba sonrojado por los comentarios de su progenitora.
La mujer de cabello oscuro mantenía su vista fija en el pelivioleta. A demás de haberle sorprendido su imprevista llegada, a Shousuke le sorprendía el gran parecido que tenía con __________, ni siquiera se veía tan mayor, incluso le recordaba ligeramente a la apariencia de su madre.
—¿Nombre?
Ante el tenso ambiente sus palabras salieron por sí mismas.
—Shousuke Komi.
—¿Edad?
—Quince...
—¿Signo zodiacal?
—¡Mamá!
—¿Qué? A los jóvenes les interesa bastante ese dato —soltó desentendida.
— Deja de interrogarlo. Además, él no es mi novio.
—Oh... —cubrió su expresión sorprendida con una de sus manos— ¿Dices que son solo amigos, entonces?
—¡Exactamente!
Pero la mirada de aquella adulta no se despegaron de Shousuke.
—Bien.
Sin insistir más, se levantó del sofá.
—__________... ¿Por qué no me dijiste que estabas enferma?
La peli___ abrió los ojos sorprendida.
—¿Cómo lo notaste?
—Lo supe con tan solo verte —colocó su mano sobre la frente de su hija para sentir su temperatura— Ve a descansar —sonrió aliviada al confirmar que la fiebre era baja.
—Mm... okay —aceptó resignada al sentirse atrapada— Shousuke, déjame acompañarte a la salida.
Él ya había pasado por mucho hoy: la cuidó y luego fue interceptado por su madre. Era su deber salvarlo de esta incómoda situación.
