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Hora de ir al local

Mientras el peli rubio cumplía su parte del trato, Gregory simplemente se quedó a fuera de la sala. Y tras varios minutos de espera, finalmente, aquel espíritu y Clay salieron de la habitación. Evan tenía una sonrisa de oreja a oreja dibujada en su rostro, mientras que Clay, por su parte, se aguantaba las ganas de llorar luego de regalarle al espíritu su juguete favorito

"Un placer hacer negocios con usted"

Comentó Evan satisfecho por sus servicios

"Ya... De nada..."

Respondió el peli rubio secándose las lágrimas que brotaban de sus ojos

"Eh... Bueno, supongo que ahora te toca a ti cumplir tu parte del trato"

Dijo Gregory mirando a Evan, recordándole el por qué habían llegado ahí y el por qué Clay había hecho eso

"Ah, sí, eso, bueno, está bien..."

Dijo él para después usar sus poderes y cambiar su apariencia a una más adecuada para el momento, quitándose su infantil pijama y reemplazando este por la ropa que habitualmente usaba antes de su muerte

"Ok, pero antes, recuérdame el por qué me necesitáis"

Dijo el espíritu con la intención de que el muchacho le recordase el plan

"Agh, vale. Clay y yo queremos ir al Pizzaplex, el problema está en que: Entre las cámaras, los guardias de seguridad y los animatronicos que hay ahí, al final nos acabarían atrapando. Es por ello que necesitamos tu ayuda, tú eras capaz de manipular las cámaras, tienes poderes paranormales y con ellos nos puedes defender de los guardias. Y en cuanto a los animatronicos... Bueno, creo que ahí no sé muy bien qué hacer"

Explicó el castaño para finalmente quedarse pensativo por aquello último que dijo, buscando alguna solución al problema que suponían esos animatronicos

"¿Qué pasa con los animatronicos? ¿Acaso te suponen un problema?"

Preguntó Evan confundido por la preocupación del castaño en ese momento

"Pues obvio que sí, es decir, lo único que puedo hacer para evadirlos es huir, huir lo más lejos que pueda para evitar que me atrapen, eso fue lo único que pude hacer la vez en la que llegué a ese lugar... Bueno, quitando lo de que los destruí también"

Respondió Gregory frustrado por no encontrar ninguna solución hacia aquellos robots que si bien ya no eran asesinos, esto debido a la exterminación de Glichtrap, seguían siendo una molestia por su modo seguro

"Comprendo, pero en realidad, estás bastante equivocado... Aquella vez tuviste que huir de ellos por una simple razón: No me tenías a mí..."

Dijo Evan para que después, de detrás suya, apareciese la figura de Golden Freddy, solo que mucho más gigantesca e imponente. Intimidando así a ambos chicos

"¿Q-Qué es eso?"

Preguntó Clay asustado mientras retrocedía lentamente sin quitarle la vista de encima

"¿Eso? Je, es difícil de explicar... Digamos que es algo así como la representación de mi alma, es como un muñeco gigante creado con mi propio remanente y agonía que yo mismo puedo controlar a mi gusto y pensamiento. Es algo así como lo que ocurría con Golden Freddy y Freddbear hace un tiempo, Freddbear era el traje poseído, sin embargo, Golden Freddy es el ente paranormal con el que se manifiestan las almas de Freddbear, lo mismo se podría aplicar aquí, yo soy el traje de Freddbear y esto de aquí es una manifestación paranormal de mí mismo, solo que en este caso, no lo utilizó para manifestarme, sino para poder defenderme"

Explicó el fantasma orgulloso de poder controlar tal enorme poder en sus manos

"Guau, ¡es como un stand de Jojo's!"

Comentó el peli rubio impresionado por lo que sus ojos estaban viendo, acercándose a aquella figura de oso dorado para intentar tocarla con la mano, únicamente consiguiendo que esta lo atravesara de lado a lado como un fantasma porque... Bueno, en esencia, esa cosa era justamente eso

"¿Y es fuerte?"

Preguntó el castaño, ya que si bien, en apariencia intimidaba bastante, lo importante en este caso era la fuerza

"¿Que si es fuerte? Ja, te sorprenderá saber lo increíblemente fuerte que es, es más fuerte que cualquier animatronico poseído, su fuerza es la suficiente como para destruir concreto con sus golpes, he hecho algunas pruebas, y tiene la suficiente fuerza como para levantar más de 40 toneladas fácilmente"

Respondió Evan con una sonrisa de pura arrogancia, en un tono de voz bastante egocéntrico

"Bueno, ¿y a qué estamos esperando? Ya todos los problemas que teníamos se han resuelto con este tipo, es hora de ir a ese centro comercial y ver si esa pizzería enterrada sigue en pie"

Dijo Clay deteniéndose de seguir haciendo el tonto con el Golden Freddy gigante, preparado para la nueva aventura que estaba a punto de vivir

...

(11:50 P.M. Pizzaplex)

"Agh, ¿y ahora dónde está tu amigo?"

Preguntó Evan impaciente y cansado de estar esperando a aquel peli rubio

"Ten paciencia, Clay tiene la manía de siempre llegar tarde a los lugares. Además, yo he tenido que ingeniármelas muy bien para poder salir de casa, y eso que Vanessa, es decir, tu... ¿Sobrina? Sí, supongo que es eso, confía mucho en mí, ahora imagínate con Clay, que tiene un padre bastante desconfiado y astuto, él necesitará hacer un plan de 200 de IQ para tan siquiera fingir estar dormido a estas horas, y ya ni hablemos de escapar de casa sin que lo vean o..."

Antes de que el muchacho pudiera acabar su frase, la repentina voz de su amigo lo hizo detenerse

"¿¡Qué onda golfos!?"

Exclamó el muchacho apareciendo detrás de su amigo, asustándo a este mismo en el proceso

"¡Ah, Clay! ¡No aparezcas así de repente! ¡Casi me matas de un susto!"

Gritó Gregory cabreado mientras se tocaba el pecho y comenzaba a sentir sus pulsaciones más rápidas

"Ay, perdón"

Respondió el peli rubio arrepentido por lo que acababa de hacer

"Oigan, no es momento de pelearse, es momento de entrar a ese local..."

Dijo Evan captando la atención de ambos. Y ya sin nada más que hacer y/o esperar, los 3 miraron fijamente el local, iluminado por las luces artificiales de su interior, listos para entrar y descubrir si sus sospechas acababan siendo reales o falsas