Foto

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Llevaba varias semanas desde que me permitieron salir de la cama. Ahora regresaba a casa, con Louis acompañándome después de la cita con el médico que tenemos aquí en Londres.

Todo iba bien con nuestro arrocito y ahora podía salir de casa y caminar fuera. Llevar mi día normal como antes. Claro que eso no se lo diría a Jeff, él debe creer que los tres meses son en cama y si llegara a salir es porque así lo ha indicado el médico de poco en poco pero con la supervisión y cuidado de mi esposo por si algo pasa. Después de todo, siempre he tenido estipulado que mis médicos sólo den información a mi esposo, madre y a mí. Jeff no está dentro de eso.

Louis conducía el auto, mientras yo tenía la vista puesta en la foto de mi ultrasonido.

—¿Quieres ir a comer, amor?— me preguntó Louis.

Fruncí mi ceño.

—¿Afuera?

Louis asintió como si fuera lo más normal del mundo para nosotros.

—Las buenas noticias deben festejarse y qué mejor que con comida.— dijo sonriendo. —Podemos ir al lugar de siempre, donde no es tan concurrido por personas que nos pueden reconocer. O...

Entonces supe que ya no quería hacer mucho de lo que no me dejaban hacer. Quería vivir mi vida, disfrutarla como debía de ser, como me decían que tenía que hacerlo.

—Vamos a donde quieras, amor.

Ahora mi esposo y yo esperábamos la llamada de nuestros representantes para decirnos todo lo que puede pasar después de que salieran fotos de nosotros juntos

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Ahora mi esposo y yo esperábamos la llamada de nuestros representantes para decirnos todo lo que puede pasar después de que salieran fotos de nosotros juntos.

Ahora mi esposo y yo esperábamos la llamada de nuestros representantes para decirnos todo lo que puede pasar después de que salieran fotos de nosotros juntos

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El primer celular en hacerse sonar después de cuando salió la foto, fue el de Louis.

—Deséame suerte.— dijo antes de ponerse de pie para tomar la llamada fuera de la habitación.

No tardó mucho en sonar el mío. Tomé un largo respiro antes de contestar.

Pulsé el icono verde en la pantalla de mi celular, aceptando la llamada.

Ni siquiera me dio tiempo de hablar primero porque ya tenía los gritos de Jeff en mi oído.

—¿¡Cómo se te ocurre salir con Louis a comer después de todos los rumores que han estado saliendo de ustedes dos!? ¿Acaso eres idiota?

—Queríamos salir a comer, el doctor recomendó que saliera a caminar con mi esposo.— dije.

—No frente a personas que los pudieran reconocer. ¿Sabes lo que van a decir? ¿Los rumores que volverán a surgir?

—Tienes tu grandioso plan de Jack, con eso basta para que más tarde empiecen a dejar de pensar que estoy con mi esposo.— hablé con ironía. —No le veo lo malo a salir con Louis, si se supone que somos amigos y yo tengo un novio y futuro papá de mi bebé.

—El cuál aparecerá después de tu descanso. Tú no puedes ser visto con Louis, ni como amigo.— dijo con rudeza.

A veces no entendía la inteligencia de Jeff y su equipo.

—Ajá, y no crees que mientras más se me obligue a no salir con Louis y no demostrar que somos amigos, más van a dudar de lo nuestro.— al fin me atreví a decírselo. —Es decir, sería extraño que no me vea con Louis cuando me he visto y he salido con mis otros ex-compañeros de banda, menos él.

—No estamos para tus reclamos. Hiciste algo mal y ahora yo, como siempre, debo arreglarlo.

—Jeff, tan sólo piensa un poco.

—A mí no me dices qué hacer. Te hablaré más tarde para decirte lo que debes hacer y evitar que hablen más de ustedes dos. Ya me pondré en contacto con el equipo de Louis.

Colgué el celular y lo aventé a la cama.

Al menos ya había una foto de nosotros dos en redes. Eso me daba un poco de felicidad.

Louis apareció en la sala de estar, con el celular en la mano, haciendo una mueca.

—¿Cómo te fue?— preguntó acercándose a mí.

—No muy bien, ¿y a ti?

Louis alzó sus cejas, haciéndome saber que nada mejor a lo mío.

—El cara de mierda está hablando con ellos para ponernos algo.— se quejó.

Asentí con tristeza en mi lugar. No me gustaba esto, nunca me gustaba.

Louis fue a la cocina, regresó con un plato con dos cupcakes que me ofreció para estar mejor. Eso me hizo reír un poco, él me conocía tan bien.

—¿Y ahora?

—Sólo nos queda esperar.— dijo Louis volviendo a su celular para buscar todo lo que decían de nosotros.

Me removí en mi lugar cuando pensé en lo que de verdad quería hacer, en lo que al final estaba tomando el coraje para hacer, gracias a las constantes pláticas con Louis y por mi bebé que merecía lo mejor en mi vida.

—Hay que salir más.— dije con una sonrisa.

Louis frunció su ceño.

—¿Qué?

—Hay que salir más.— reforcé. —Vamos a ser normales por una vez, Lou. Después de todo, tú dijiste que te pusiste en contacto conmigo por mi embarazo y que somos mejores amigos, yo supuestamente tengo novio... no le veo lo malo a estar con quien es mi amigo y me está apoyando en mi embarazo.— sonreí con satisfacción ante mi esposo que me miraba incrédulo.

—Yo no quiero hacer nada que te afecte, amor. Puede ser malo para lo que llevas ahora en tu carrera y los contratos. No quiero ser el culpable.

—No lo serás, Lou.— dije con tono tranquilizante. —Yo quiero esto y la verdad... me da igual si por esto Jeff quiere joderme mi vida. Al menos podré estar con mi bebé y contigo. Eso es todo lo que me importa.

—Harry... yo no creo...

Besé sus labios.

—Quiero esto, en serio.

Louis pasó su lengua por sus labios. Los mordió un poco cuando pareció pensárselo.

Chasqueó su lengua.

—Bien, saldremos más y empezaremos a vivir un poco de nuestra vida normal.

Baby On Tour [L.S] [M.Preg]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora