Descanso

1K 155 34
                                    

En cuanto salió, Azul me abrazó con fuerza, felicitándome por lo que había hecho. Diciéndome que no me preocupara y que todo estaría bien, que yo sabría cómo afrontar todo lo que se venga y ella estaría siempre conmigo, sin importar nada. Yo la abracé aún más fuerte.

Estando más tranquilo y con todas las ideas en mi cabeza, llamé a Louis. No podía ocultar mi sonrisa y por supuesto, no me sería fácil no decírselo hasta que llegara a casa. Tenía que contárselo de una vez.

¿Mi amor?

Me respondió desde el otro lado, con ese tono de duda instalado en su voz porque no era normal que lo llamara sabiendo que podía estar ocupado. Normalmente le envío mensajes y después él y yo nos llamamos.

—¡Despedí a Jeff!— hablé dando pequeños brincos en mi lugar. Con mi mano temblando por la emoción.

Hubo un buen rato de silencio en la llamada. Sabía que Louis trataba de analizarlo bien y saber si había escuchado con claridad.

¿Despediste a Jeff?— preguntó.

Asentí aunque no me podía ver. Azul me miraba, con sus manos tapando sus labios. Sus ojos expresaban felicidad por mí. Ella es la mejor.

—Tal cuál como lo escuchaste, cielo. Jeff ya no es mi manager. Aunque... debemos de conseguir otro rápido, uno bueno que respete nuestra relación. Jeff me amenazó con terminar mi carrera y sería bueno tener a otro para lo que se venga, igual llamar a nuestro abogado.

Escuché una puerta cerrarse del otro lado de la línea. Un silencio por completo, sin murmullos de que Louis siguiera rodeado de personas. Probablemente su equipo.

¿Cómo te sientes?— preguntó preocupado. —¿No estás mal por lo que pueda pasar?

Sonreí encogiéndome de hombros. Acariciando mi pancita por las pataditas de mi bebé.

—No.— respondí con facilidad. —Estoy bien. Me siento tranquilo.

Eso es bueno, amor.— pude imaginar su sonrisa y su rostro relajándose. Probablemente apoyando su mano en su cintura. —Estoy a diez minutos de terminar con esto. ¿Te veo en casa en treinta y platicamos bien de esto? Creo que hay mucho que debes contarme y de lo que tenemos que prevenir.

—¿Y traes pizza? Nuestro arrocito quiere pizza.

Su sonrisa melodiosa llegó a mi oído.

Lo que quieran mis dos más grandes amores.— chasqueó sus labios. —Te amo, te veo después.

—Te amo, cielo.

Louis llegó a casa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Louis llegó a casa. Dejando todo sobre la mesa del comedor. Corriendo hasta mí que estaba recostado sobre el sofá.

Se arrodilló frente a mí, besando mi vientre y saludándolo. Haciéndome reír por las cosquillas que me causaba su barba. Antes de que dijera algo, abrió la caja de la pizza que llevaba entre manos.

Baby On Tour [L.S] [M.Preg]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora