¿Donde estamos?

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Serkan empieza a despertarse, está apoyado en un cuerpo suave y blando. Se acomoda mas a él, cuando levanta la mano para llevársela a la cabeza, se da cuenta que está esposado a ese cuerpo blando... Su pecho pega directamente con la espalda de ella. No quiere abrir los ojos, ese cuerpo tiene su trasero directamente aposentado en su erección matutina... sabe que es sano, pero en estos momentos es muy muy incomodo porque ella parece que le busque.

La cabeza le va a matar...y siente su mano acunando un pecho. Un pecho perfecto, y ella se frota contra su palma lo que no ayuda en nada a Serkan. No quiere abrir los ojos, el pelo de ella le hace cosquillas en la nariz y huele a flores frescas, su mente se tranquiliza, Selin nunca usaría algo tan sencillo para su pelo como un jabón de flores, pero le recuerda a alguien. 

Ella se mueve, y Serkan es lo suficientemente versado para saber que los dos están desnudos, bajo las sabanas y esposados.

Abre los ojos, ve el pelo castaño y una mano con sus dedos entrelazados a las de ella pero no le ve la cara... 

Eda tiene frio, se acerca en el duermevela al cuerpo que le abraza y le da calor. ¿Un cuerpo?, la cabeza le va a matar.

Ese cuerpo se mueve y algo le está pegando en el trasero, y se sienta en un momento estirando la mano de Serkan y dejando que la sabana se caiga hasta su cintura. Ella no ha hecho la evaluación que ha hecho Serkan de la situación.

Ella estira la sábana al tiempo que destapa a Serkan y él coge la almohada que ella abandona para tapar sus partes.

Ella no puede huir mucho cuando Serkan le frena con la mano de las esposas.

Eda está de pie al borde de la cama cubierta a duras penas con la sábana y él tumbado en la cama con la almohada entre las piernas y sujetas por su mano libre.

Las manos esposadas están entre la cama y el borde.

¿Serkan?— pregunta ella alucinada.— ¿que me has hecho?

¿Yo? ¡Te iba a preguntar lo mismo!— dice Serkan 

¡Estas desnudo!— dice ella.

¡Tanto como tu!— dice él.

Ella se mira y se sube la sábana. 

¿Como.... Como hemos llegado aquí?— pregunta él.

Mierda Mierda Mierda—dice ella sentándose en el borde de la cama.

La mano de Serkan reposa en el muslo de Eda y él está a su espalda.

Serkan se acerca a ella — no te muevas.

¿Que no me mueva?¿que vas a hacer?— pregunta ella.

Voy a coger la colcha Eda... y me voy a cubrir...— dice acercando la colcha que está a los pies con un movimiento de su pierna. Se arrodilla detras de Eda y se envuelve en la colcha. 

Coge la sabana de Eda y con los ojos cerrados le cubre bien a ella. 

Están sentados uno al lado del otro.

Bien, ilumíname....— dice Serkan.

Mi abuela... seguro que ha sido mi abuela.... Semiha Yildirim... creo que te he plantado 4 o 5 veces Serkan Bolat... la empresa de tu padre, esa con la que mi abuela quería asociarse.... Proyectos en Italia, proyectos en Turquia.  Mierda no se como no lo vi venir.... — dice Eda.

¿Tu abuela nos metería en una cama juntos desnudos en el siglo 21? Eda...— dice Serkan...

¿Donde estamos?— pregunta Eda.

Serkan la mira — en la casa de verano de mi familia....

Pues sola no lo ha hecho.... Tus padres.... ¿Crees que tus padres se prestarían a esto?— pregunta Eda.

Al final nos habeis hecho un favor....Donde viven las historias. Descúbrelo ahora