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Juliette no estaba muy emocionada por volver, pero no podía negar que le emocionó manejar sobre el agua.
En Auradon, James y Lari se habían reunido con Jane para celebrar su fiesta de cumpleaños. Jane los recibió de brazos abiertos, estaba felíz de verlos, puesto que los demás no llegaban. Aunque Jake intentaba hacerla sentir mejor.
Audrey llego a atacarlos, pero Jane, Jake, James y Lari lograron salvarse de dormir gracias al lago encatado. Claro que todo eso estaba pasando en Auradon, y ni Juliette ni ninguno de los demás sabían.
Entraron a la Isla para estacionar sus motos.
───. Hey, otra vez soy yo ─── dijo Mal feliz, tocando su cara. Era verdad, ya no era una anciana.
───. Claro, la magia malvada no funciona aquí y ese es el punto ─── Celia rodó los ojos obvia.
───. Bienvenida ─── Evie pasó su brazo por los hombros de Mal, ambas avanzando juntas. Jay y Lukas las siguieron para dejar a Carlos y a Juliette detrás.
Siguieron a Celia, Carlos iba tomando la cintura de Juliette mientras caminaban, y eso la ponía nerviosa, pero no era momento para eso.
Celia los llevó a una puerta, que se abrió después de una secuencia de toques, entraron por esta y llegaron a un lugar donde había muchas personas, y también el padre de Calia. Ambos se saludaron calidamente y hicieron un pequeño baile, eso le hizo a Juliette recordar lo mucho que desaba tener un padre en su niñez.
Celia y su padre los dejaron atrás mientras ellos observaban todos. El lugar era muy colorido, igual que la mayoría de cosas en la Isla.
───. ¿No les parece raro que Lukas y yo siempre estemos metidos en este tipo de "aventuras"? ─── hizo comillas ───. Ni Ben, ni Doug, ni James o Larissa.
───. Tal vez sea porque tú y Lukas viven pegados a sus parejas ─── bromeó Evie, dirigiendole una significadora mirada a Carlos.
───. Okey, sí, en esta ocasión es así. Pero, ¿qué con el año pasado? ─── admitió Juliette.
───. Que yo recuerde tú te subiste a mi moto ─── señaló Mal, divertida.
Juliette gruñó.
───. Ugh, y no me arrepiento ─── rodó los ojos mientras sus amigos se reían de ella.
Carlos metió una momeda en una televisión y se sentó en una silla, Juliette se sentó en sus rodillas.
───. No dejan de llegar alertas de un hechizo de sueño mientras se esparce por Auradon ─── dijo el reportero, que estaba fuera de la preparatoria.
