Superar el dolor

5-Por fin te reíste

AR: Descansa Hünkar, -la tapó con una manta- te amo...

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El sol comenzó a entrar lentamente por la ventana, calentando suavemente los dos corazones que se encontraron en un cálido y esperado abrazo.
Ali Rahmet fue el primero en despertar, sintió un aliento caliente en su pecho, vio a su amada Hünkar durmiendo sobre su pecho.
Le acarició suavemente la mejilla y depositó un pequeño beso en su frente, ella se acercó más hacia él y Ali Rahmet vio que eran las seis de la mañana.

H: Alí Rahmet...

AR: Shhh aún es temprano, -se levantó y la dejó sobre la almohada-.

Ali Rahmet salió de la habitación y fue a la habitación de invitados, se duchó y se cambió de ropa, vistiendo una camisa negra y pantalones oscuros.
Sintió que el teléfono comenzaba a sonar, y de inmediato fue a contestar para no despertar a Hünkar.

AR: Dime.

C: Buenos días señor, soy Cetin.

AR: Buenos días Cetin.
¿Lo encontraste?

C: Si señor, lo dejamos en uno de los almacenes abandonados.

AR: Está bien, Cetin, yo iré más tarde.
¿Sabes algo sobre Yilmaz?

C: No, no sabemos nada,tampoco lo vieron.

AR: Bien, muchas gracias, Cetin.

Ali Rahmet dejó el teléfono y fue a la cocina y comenzó a preparar el desayuno.
Preparó un poco de té, cortó las verduras, hizo pan con mermelada y colocó un plato con aceitunas y un pequeño panqueque para Hünkar.
Salió al jardín de la casa y buscó un pequeño ramo de flores.
Puso todo en una bandeja y se dirigió a la habitación de Hünkar, lentamente abrió la puerta y vio que Hünkar aún dormía, dejó la bandeja sobre la mesa.

AR: Te ves tan tranquila cuando duermes.

Abrió los ojos después de murmurar algo.

AR: Buenos días, Hunkar.

H: Buenos días.

AR: ¿Has dormido bien?
¿Te duele algo, debo cambiar los vendajes?

H: Si dormí bien, gracias por quedarte, -un ligero rubor apareció en sus mejillas- mejor cambiaré el vendaje de mi brazo.

AR: Vale, ahora tienes que desayunar y luego te limpio la herida.

Ali Rahmet acercó la bandeja y la colocó sobre la cama, y ​​Hünkar miró todo lo que había en la bandeja.
Ali Rahmet le dio un pequeño ramo de flores y Hünkar olió su hermoso aroma.

H: Muchas gracias, todo se ve muy rico.

AR: Espero que te guste.

Ali Rahmet tomó uno de los panes y se lo dio a Hünkar.

H: Ali, puedo comerlo yo mismo, no es necesario que me des la comida.

AR: Sé que no has terminado tus platos, así que me encargaré,se lo prometí a Züleyha.

Hünkar sabía que no tendría sentido discutir y entonces obedeció.

H: Todo está delicioso, gracias Ali Rahmet.
¿Has cocinado antes?

AR: Una de mis tías quería enseñarme, aunque al principio era un desastre.
Casi inicio un incendio cuando estaba encendiendo un fuego en su cocina, recuerdo que mi tía traía baldes de agua y luego todo se inundó.
Así que simplemente mezclé los ingredientes durante dos semanas, pero no toqué el horno durante mucho tiempo.