•Mi Luz•

•28•

Tres días antes
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- Awww ¡Mikey es realmente muy lindo!-

El pequeño posaba con los trajes para niños que Abril sacaba para el, de abejita, un pantalón de lentejuelas con una camisa blanca manga cero y unos lentes con marco blanco, un vestido de flores con un gorrito tejido y girasoles, un pantalón rayado con una camisa palo rosa, todo tipo de ropa era perfecta para el.

- ¡Si! ¡Mikey es muy lindo!- exclamó Rafael alzando sus bracitos-

- ¿Donnie sabe que le estás comprando ropa?- cuestionó Cassandra con un semblante serio-

- Donnie sabe que le estoy comprando ropa lo que no sabe es cuánta ropa-

- Leo, te meterás en problemas, y eso no me sorprende- se metió ahora Usagi, sentandose aprovechando para ver unos zapatitos de bebé, su bebito tendrá la mejor ropita-

- Miren eso-

Casey movió la cabeza en dirección a los dos menores. Rafael fue a abrazarlo mientras se miraban en el espejo, lo que hizo que todos sonrieran enternecidos y volviera a Abril loca como para tomar varias fotos fue el beso que el pequeño rojo plantó en la mejilla del naranjita.

- ¿No es lindo que esos dos tengan un romance?-

- ¿Romance? Usagi aún son niños- protestó Leo-

- ¿Y que? Van a crecer de todas formas y esas miraditas felices se convertirán en miraditas complices y enamoradas-

- No le digas eso Usagi- carcajeó la alfa- Leo no solo es celoso con sus amigos también lo es con su ahora hijo-

- No son celos, no confío en los alfas es todo-

- ¿A pesar de tu ser uno?-

- Odiaba ir a la universidad por todo lo que escuchaba, alfas con pensamientos estúpidos diciendo lo que harían con sus parejas, llegué hasta odiarme a mi mismo- volvió a mirar a los dos pequeños- hasta ahora no dejo de tomar mis medicinas-

El pequeño Rafael cargaba a Mikey quien reía por las vueltas- Te quiero mucho Mikey- ambos se abrazaron para mirarse y reír-

- Yo te quero más Rafi-

- Dios, es el amor más puro que ví- dijo Cassandra haciendo un puño golpeando aquella silla de espera-

- Me siento tan repugnante- Adam cubría su rostro con total vergüenza-

Leo terminó pagando todas las prendas con su tarjeta ilimitada.

- La prenda no tiene ningún precio iré por una con etiqueta señor-

- Si claro, adelante- la tranquilizó el azul con una sonrisa-

Los adultos cuidaban a los niños quienes se tomaban de la mano para ver más ropita. Leo no podía sentirse más feliz al ver a Mikey tan contento.
Su mirada se desvió al poder oler a un Omega algo mayor pero muy encantador, ropa de algodón, camisa holgada y muy notable textura suave, con unos jean que cubrían la blusa en la parte de su cintura y unos zapatos casi tacones, su abrigo cubría sus hombros ya que no lo tenía completamente puesto. Se acercó a dónde el azul se encontraba y simplemente se quedó esperando atención, era inevitable para Leo no verlo, era un Omega tan hermoso.

- Aquí tiene encontré esta prenda con la misma talla- sonrió amable la mujer. Solo segundo le bastó para hacer una reverencia al Omega- Señor Von, que alegría verlo aquí-

/¿Von?/- se preguntó así mismo el alfa-

- Fue agotador, se siente bien estar de vuelta-

- ¡Papi Leo!- Mikey corrió hacia el azul para pedirle un trajesito de patito que vió como pijama- ¡Papi Leo! ¡Quiero!-