Químico (Drabble)

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A Levi no le gustaba el olor del cigarro, tampoco le gustaba fumar; y sin embargo, lo hacía porque era lo único que lo relajaba.

Lo hacía todo el tiempo, en el estacionamiento de un bar mientras su tío Kenny le partia la mandíbula a alguien.

En el balcón de su departamento, mientras escuchaba a su odiosa vecina Hange cantar baladas estando borracha.

Y en el parque cerca de donde trabajaba, donde el humo podía perderse entre los árboles.

Sin embargo, existía un lugar en el que Levi jamás se atrevería a fumar: la casa de su novio, Erwin Smith.

—Mi madre murió por el cigarro—Dijo Erwin cuando Levi le preguntó porque tenía prohibido fumar en la casa, y porque Erwin no quería tocar ningún tema que contuviera la palabra nicotina.

—Oh, lo lamento.

—Gracias—Erwin suelta un largo suspiro, Levi nunca lo había visto tan sensible—Le juré a mi padre que no caería en ningún vicio, que sería libre de todo eso…aunque creo que soy adicto al trabajo.

—Podrías ser adicto a mí—Añade Levi en un intento de aliviar la situación—No me importaría cambiar el cigarro por tí.

—Ja…—Erwin muestra una pequeña sonrisa—No podemos ser adictos entre nosotros, no saldríamos de la habitación y moriríamos de hambre.

Levi sonríe (un poco, pero es una sonrisa al fin y al cabo), y se acerca para besar a su rubio favorito. Sentados sobre el sofá, con una película en pausa en la pantalla mientras la lluvia sigue golpeando las ventanas.

—No puedo quitarte las manos de encima—Susurra Levi mientras observa a su pareja a los ojos—Te amo demasiado, por eso quiero abarcarlo todo…

—Tienes permiso para eso—Responde Erwin con una sonrisa pícara.

Levi le toma la palabra y se abalanza encima mientras besa con deseo sus labios y desliza sus manos por debajo de la camisa blanca de Erwin.

Esa fue la última vez que tocaron el tema (y después tocaron otras cosas).

Desde entonces Levi fumaba menos, cada vez que daba una inhalada pensaba en Erwin, en su mirada decaída cuando hablaba de su madre. Erwin detesta el humo del cigarro, pero tampoco puede prohibirle a Levi dejar de fumar; ambos son adultos, y aunque sean pareja, hay cosas que escapan de sus límites.

Hasta que una noche, cuando Levi no tenía ánimos de soportar a su tío, se quedó en casa de Erwin toda la noche; y al día siguiente se encontraba acostado sobre la cama del rubio, sin camisa, despeinado y sumamente relajado. Mientras Erwin terminaba de vestirse, ya que tenía una reunión en la oficina.

—¿Seguro que no quieres venir conmigo?—Pregunta el rubio, a lo que Levi niega con la cabeza, todavía en la cama.

—Aunque te veas atractivo en corbata, no me apetece esperar en el pasillo.

—No tardaré mucho, después de eso podemos ir a donde quieras—Erwin se acerca para besar a Levi en la frente—Nos vemos en un rato.

—Okey señor Smith—Levi nunca lo admitiría, pero le gustaba ser consentido por Erwin—Bye.

Erwin se va; siendo tan temprano Levi decidió dormir un poco más, su cuerpo necesita un descanso así que eso mismo hizo.

Sin embargo, pasado el mediodía, ya se encontraba ansioso; llevaba cuatro días sin fumar, no quería fumar en el departamento de Erwin porque este notaría inmediatamente el olor.

Así que se vistió, se puso el abrigo, tomó su cartera, su móvil y salió a la tienda de la esquina para comprar una cajetilla. Fumaría afuera, así Erwin no reprocharía nada.

Tras comprar la cajetilla, Levi sacó uno mientras caminaba de vuelta a la casa de Erwin. Apenas colocó el cigarro entre sus labios cuando escucha la notificación llegando a su móvil. Levi lo mira y se detiene en la banqueta.

Ya casi salgo de prisión : ) ¿Qué te parece si salimos a comer? Hay que celebrar.

Levi deduce de qué se trata: el ascenso que Erwin lleva todo el año exigiendo.

—(Ahora es el jefe Smith)—Piensa Erwin mientras saca su encendedor del bolsillo, estaba a punto de prender el cigarro pero, una vez más, Erwin inunda sus pensamientos.

Levi también detesta el olor a humo, lo detesta más que Erwin, detesta fumar, siente que quema sus pulmones, que exhala veneno, ¿cuántas veces sus labios tenían impregnado el sabor a colilla, y aún así Erwin los besó?

Fue así que Levi comprendió que el único que podía obligarlo a fumar y a dejarlo era él mismo.

Levi retira con cuidado el cigarro de sus labios, toma la cajetilla y los mira. Pensaba que era lo único conseguía relajarlo, pero entonces recuerda esta misma mañana; sobre la cama, mientras Erwin besaba su frente.

…Levi sentía paz, y no gracias a lo que sostiene sus manos.

Aceptando ese hecho, Levi tira la cajetilla y el cigarro a un cesto de basura cerca de la casa de Erwin; después saca su móvil para responder el mensaje de hace rato.

Hay mucho que celebrar jefe Smith
te amo

Después de unos minutos, la respuesta de Erwin llega:

También te amo señor Ackerman, provocas todo en segundos

Levi sonríe al leerlo. Esto era verdadera paz, y haría de todo para conservarlo.

Fin


Este uno de los drabbles que más me han gustado escribir 💕

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