Eruri Zone ☘️

Matutino (Drabble)

Erwin Smith, aunque no lo parezca, es un hombre de peculiaridades.

Muchas veces necesitaba cierta rutina en su vida para sentir que tenía control sobre su entorno. El control le da la sensación de seguridad; gracias a esas peculiaridades, Erwin ha podido sobrellevar su posición de comandante de manera que no lo enloquezca tanto.

Una de sus rutinas es leer el periódico en la mesa del comedor junto a la ventana. Siempre en las primeras horas del amanecer, compartiendo el desayuno en soledad; es el único momento de paz que Erwin encuentra en su día a día antes de sumergirse en el revuelo de la Legión de Reconocimiento.

Sin embargo, un día a primera hora de la mañana, Erwin se encuentra con Levi sentado en "su asiento" junto a la ventana, bebiendo una taza de té.

—Levi, qué sorpresa—Expresa Erwin con una sonrisa, mientras se sienta en la silla frente a Levi—Casi nadie viene aquí tan temprano.

—¿Te molesto?—Pregunta Levi antes de darle un sorbo a su té; Erwin niega con la cabeza.

—No, es... diferente tener compañía aquí—Erwin abre el periodico, mientras Levi sigue bebiendo en silencio.

Se crea un silencio. Levi observa a través de la ventana mientras Erwin sigue leyendo.

—¿Algo interesante?—Pregunta Levi mientras sigue observando el paisaje.

—Vaya, casi nunca buscas charlar conmigo—Responde Erwin mientras alza una ceja con una sonrisa.

—No tengo otra cosa que hacer—Responde Levi mientras su taza está a la mitad.

—Bien—Erwin vuelve a posar la mirada en el periódico—Nada interesante realmente, el rey está organizando un evento de caridad en el muro Sina.

—El rey es un idiota, ¿y cuando se va a preocupar por los que no viven en el muro Sina?—Responde Levi de manera tajante, todavía observando por la ventana.

—Tienes razón—Erwin sonríe—Dice aquí que invita a cualquier contribuyente a participar.

—¿Acaso sabe que los únicos que pueden contribuir son los ricos porque los demás se mueren de hambre?—Pregunta Levi antes de darle otro sorbo a su té.

—Cierto—Erwin baja el periódico para observar mejor al pelinegro—No conocía tus posturas en esos aspectos, Levi.

Levi gira su cabeza para observar al comandante, con su característica expresión seria.

—Nunca hablamos de esos temas, debe ser por eso—Responde Levi.

—Deberíamos hablar más—Erwin ladea la cabeza, contento con su idea—Claro, si estás de acuerdo.

Levi toma su taza, desvía la mirada.

—Hablo mucho, aunque no lo parezca—Levi acerca la taza a sus labios.

—¿Es un sí a mi sugerencia?

Levi levanta los hombros antes de beber su té, dándole un último sorbo.

—No tengo otra cosa que hacer en las mañanas, de todas maneras.

—Gracias, Levi—Erwin se siente verdaderamente feliz de pasar tiempo con Levi Ackerman.

Desde entonces Erwin Smith, un hombre aparentemente imperturbable, se desenvuelve en su vida con una serie de peculiaridades que, lejos de ser caprichosas, eran necesidades. Sin embargo, con ese encuentro con Levi, se abre la fortuita oportunidad de una conexión más profunda; la ventana, testigo silencioso de sus pensamientos y charlas matutinas, se convierte en el telón de fondo de una nueva dinámica entre ellos, a través de ese rincón exclusivo en el descontrol mundo de afuera.

Fin