Sirviente del Gobernante

Capitulo 3: El caballero rebelde

—Increíble... estúpidamente increíble.

Decía la mujer rubia mientras estaba enojada tirada encima de una cama hecha de piedras.

—Que? Te compré las ropas modernas como querías.

—Las ropas están bien pero el problema es otro maestro.... ¡POR QUÉ TENEMOS QUE ACAMPAR EN LAS CATACUMBAS!!

—No pidas demasiado, además no se pueden encontrar líneas de ley de primera clase como las que hay aquí, también te deberían de ayudar en recargar más rápido tu suministro de maná sabes.

Decía Kairi sentado a un lado mientras agarraba con unas pinzas una cabeza de serpiente.

—Maestro qué es eso? ¿No es comida verdad?

—Es una hidra bebé, está conservada en ese pote, es un valioso artículo en su tipo.

—Y... que haces con ella?

—Ja, ¿acaso los olvidaste? Soy un nigromante, las estoy procesando.

La rubia se levantó de dónde estaba tirada y dirigiéndose al envase.

—A ver... déjame ver.

—Espera no la toques!

La rubia se asustó parando lo que iba a hacer al tocar el envase.

—Con... hidra te referías a

Kairi mirándola asintió.

—El cuerpo de las hidras están llenas de veneno, en una adulta incluso respirarlo cerca te pueden inflamar los pulmones. Pero este es el cadáver de un bebé, no habrá problemas mientras no la toques, pero es mejor prevenir que lamentar.

—Que harás con ellas?

—Si hubiera sido una adulta las hubiera utilizado en flechas, pero en este tamaño, las dagas son lo único que puedo hacer, sobraré un poco por si acaso.

—Te tomará mucho tiempo?

—Unas tres horas, mientras vuelve a dormir si quieres.

—Está bien.

La chica volvió a la cama hecha de piedras.

—Hmm maestro?

—Diga

—Qué deseo le pedirás al Santo Grial?

—Por qué lo preguntas?

—Porque me aburro, al menos habla conmigo para pasar el tiempo maestro.

—ya veo, mi deseo para el Santo Grial es la prosperidad de mi familia. Después de todo soy un mago.

Dijo Kairi sonriendo.

—Qué? Ese deseo es aburrido.

—La familia que prospera es importante, si tienes hijos, tienes mayor probabilidad de que cumplan tu sueño.

—Los hijos no siempre triunfan en los sueños de sus padres.

—Lo dices por experiencia caballero de la Rebelión? Sir Mordred, ¿bueno ya que me preguntaste me toca preguntarte también cuál es tu deseo verdad?

—Tch... ese rey nunca me reconoció incluso en el final, tanto como en habilidad de espada y gobernar yo estaba a la par con el rey... incluso mucho mejor que él. Pero el maldito me negó mi derecho usando mis orígenes de nacimiento como razón, así que me rebelé y le demostré a todos que el reinado de ese rey era para nada.

—Así que tú deseo es convertirte en rey?

—No maestro, incluso con eso mi padre no me reconocería, mi deseo para el Santo Grial es la oportunidad de desafiar la espada de la selección, eso es todo.