Merlina logró llegar a donde estaban todos los demás, apenas podía verlos ya que había perdido bastante sangre y ese último ataque de Joseph Crackstone fue lo bastante fuerte como para tener la certeza de que, de no ser por Bianca, no estaría allí en ese momento.
Caminó apenas como pudo, a lo lejos vio a alguien moverse con rapidez entre la gente, desesperada, nerviosa, intranquila y con el terror en sus ojos pensando lo peor, apenas pudo verla porque en el momento en que Enid supo que era ella, la chica no vio a nadie más a su alrededor, o su estado o nada más en particular, simplemente saltó hacia Merlina, abrazándola efusivamente, con el desespero de alguien que pensó que había perdido a alguien muy importante.
Pasando sus brazos por su cintura, rodeándola con estos y atrayéndola a ella con la fuerza de un lobo, sintiendo en ese momento su cara justo a un lado de la suya, su abrazo había sido demasiado rápido y apenas pudo reaccionar, de forma inconsciente colocó su mano en su hombro, separándola y haciendo que tomara distancia.
Merlina vio aquel rostro cubierto de sangre, las heridas, pero más allá de eso las lágrimas y el terror de que pensó que no volvería a verla porque quizás no llegó a tiempo para protegerla de Tyler y este ya le habría causado algún daño peor. Sí, Merlina la había apartado de forma inconsciente como acto reflejo a su regla de cero contacto, pero conscientemente, y sin saber que podría tener dicha necesidad, abrazó a Enid con fuerza, no con nerviosismo, no con sutileza, no como quien da un abrazo solo para que el otro sea correspondido, sino con el mismo sentimiento de aquel que al fin aceptaba que una vida solitaria no era lo que quería para ella.
Enid pasó sus manos por su espalda, sacando un poco sus garras, apretando fuertemente su camisa, mientras que Merlina se apegaba a ella y ocultaba su rostro en su hombro, hundiéndose en este y cerrando los ojos, algo extraño para quien le conociera, puesto que no era de parpadear frente a otros, pero con Enid cerró sus ojos y se fundió en aquel contacto que no pidió, pero descubrió necesitaba enormemente para calmarse tras todo lo ocurrido.
Y aunque aquel abrazo pudo haber durado horas tranquilamente, Merlina se tambaleó un momento, Enid la sostuvo a tiempo y descubrió que su ropa tenía sangre nueva y provenía de su roomie.
—Espera ¿Qué pasó? ¡Necesitamos llevarte urgente a un hospital, ya!
—No tienes que preocuparte— Dijo mientras colocaba un mano en el hombro de Enid para apoyarse y otra en su estómago— La herida que me hizo Crackstone con el cuchillo no está tan mal, pude sanarla con...
—¡Una herida de cuchillo!— Gritó Enid sin dejarle terminar, haciendo que Merlina ahora su rogara por algo de distancia.
—Sin contar que recibió una flecha por mí— Dijo Xavier.
—¿Qué tú qué?— Volvió a gritar Enid.
—¡Estoy bien, no es para ta...!
—Y Crackstone casi la mata hace minutos— Prosiguió Bianca.
Enid estaba herida, tenía sangre en todo su cuerpo, había luchado contra un Hyde en su primera transformación como Lobo, aunque estaba más que agotada y podía caerse debido a la debilidad que cargaba encima, todas las cosas que había escuchado hicieron que, de una u otra manera y atentando contra su propia vida, hiciera oídos sordos con Merlina y simplemente decidiera cargarla sin más.
—¡Enid, Bájame!
—No puedes ni caminar, necesitar ir al hospital.
—¡Que me bajes, ahora!
—Luego podrás asesinarme como gustes, no tienes la fuerza para negarte.
—Esto es ridículo, tú también estás herida.
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Relatos Wenclair
RomantikRelatos cortos (y otros no tan cortos) de WenClair, la shipp de Merlina y Enid de la serie Merlina. ¿Qué tan bien puede ser la química entre un cuervo y un lobo? ¡Vamos a averiguarlo! Romance, drama y un toque de humor.