The Jeon Spouses (kookmin)

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A la mañana siguiente, como todos los días la capital de Corea, Seúl se encontraba en movimiento desde tempranas horas como cualquier ciudad de alto nivel de miembros, los autos transitaban con rapidez hacia destinos diferentes y las empresas nuevamente se enfrentaban entre sí como cada día de los 365 días del año.

Pero por alguna razón el presidente de las compañías más prestigiosas de la zona se encontraba en su cocina con un cuchillo y una tabla de madera frente al mesón mientras sonreía felizmente como si cortar frutas fuera su sueño hecho realidad.

Si, el castaño estaba haciendo el desayuno para su amado esposo que justo ahora se encontraba bajo las sábanas aun desnudo.

Eran apenas las 7:15 de la mañana cuando el alto y fornido cuerpo de Jeon se movió con dos platos llenos de alimentos saludables aun estando en sandalias y pantalón de chándal recién bañado pues los jugueteos de ambos habían terminado en cuerpo exhaustos llenos de fluido y ninguno tuvo la fuerza para ir a ducharse esa noche.

Tapo bien los alimentos y subió los escalones yendo a su habitación con rapidez abrió la puerta sin hacer mucho ruido y no encontró ningún sensual cuerpo en la cama, más el sonido de la ducha le hizo saber donde se encontraba el enano.

Fue en dirección al closet y de este saco un traje bien planchando junto a unos lindos zapatos de cuero.

Se coloco las prendas dejando de lado el saco y solo quedando con la blusa y la corbata no anudada se sento en el sofá cerca a la ventana prendió su móvil, había algunas notificaciones, eran varios archivos, archivos de los cuales liberaría en su despacho más tarde, su agenda nuevamente comenzaba a llenarse, tenía varios eventos, los cuales planeaba ir en compañía de Jimin, ceremonias y de más, mientras que los informes con los agentes que había contratado con discreción absoluta seguían enviando información desde hacia ya días y que no había tenido la gana de abrir ahora que comprendía completamente todo aquello que estuvo enfrente suyo y que fue tan estúpido para no darse cuenta.

La ducha dejó de escucharse y por instinto levantó la mirada observando la figura del peli-azul salir de ella con una toalla en la cintura.

—Ah!~ maldición, me asustaste, había creído que habías salido idiota.—Park camino sonoramente hacia la cama sentándose en ella.

—Quería desayunar contigo.—No supo como fue que sus ojos mantenían la mirada del más bajo cuando su corazón se encontraba bombeando sangre a más no poder.—Estaba haciendo el desayuno y vine a despertarte.—Se levantó y camino hacia su contrario hasta posarse a su lado tomando la confianza de tomarlo por la cintura y sentarlo en sus piernas.

—Auch!—Jimin hizo un gesto de dolor cuando fue sentado y por inercia apretó la rodilla de Jeon en un intento de calmar el dolor.

—Qué pasó?? Te duele?—La preocupación del castaño se hizo notar queriendo saber donde le dolía.—Fui muy brusco anoche, lo siento me dejas ver??

—Qué? No te dejaré ver nada! Qué pregunta es esa Jungkook!?

—Solo quiero saber si te sientes muy mal Minnie, duele mucho?

—Deja de hacer esas preguntas idiota!—Las mejillas de Park se tornaron rojizas y se levantó alejando las manos del castaño.—Me cambiaré y bajo bien??

—Yo necesito pasar al baño, tengo que peinarme.

—Bien hazlo ya y no salgas hasta que yo lo diga.

—Te he visto desnudo más veces que tú mismo lo has hecho Park.

—Puedes cerrar la boca solo un segundo? Tengo que cambiarme así que sal de aquí ahora!