Rebekah Mikaelson

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T/N salvatore


-¿Qué piensan hacer?‐ le pregunto a mis hermanos.


-Mantener a Elena a salvo, con los híbridos de Klaus acechando no es seguro que este sola- dice Damon.

-No creo que esa sea la mejor idea, solo piénsalo, Elena no estará contenta con que la tengan vigilada todo el día como a una niña- le digo para que piense en otra solución, con todo el drama que se a formado por la sangre de Elena para que Klaus siga creando sus híbridos las cosas han estado un poco tensas.

-T/N tiene razón Damon- le dice Stefan dándome la razón.

Escucho como planean mantener a salvo a la castaña sin que se sienta más agobiada por todo lo que está pasando. Después de un rato me aburro y salgo a dar una vuelta para distraerme de todo lo que esta pasando, desde que llegaron los originales al pueblo todo se volvió un caos, más que nada por niklaus ya que al querer la sangre de elena no faltan las amenazas de muerte para conseguir lo que quiere.

Sigo caminando hasta que llego al grill, me siento en una mesa y pido una botella de tequila. Estaba tan concentrada en mis pensamientos que no me di cuenta cuando alguien se sentó frente a mí.

-hola amor-

-Mikaelson- le digo en forma de saludo.

-Por favor cariño puedes ser más cariñosa- me guiña un ojo y me quita el vaso del que estaba bebiendo para tomárselo ella.

-¿Qué nesecitas Rebekah?- suspiro mientras miro como me da una de sus sonrisas coquetas.

-mmm fácil, a ti en mi cama gimiendo mi nombre mientras te hago mía- susura cerca de mi rostro haciendo que me sonroje.

Rebekah desde que llego a mistic falls siempre que tiene oportunidad me coquetea, me dice cosas subidas de tono haciendo que me ponga nerviosa con su presencia, sumándole que del primer momento que la vi me flecho y de cierta forma es algo que se suma a las tantas cosas que tengo en la mente y no me deja tranquila.

-Lastima que no se va a poder- intento responder lo más calmada posible sin que note que sus palabras me afectaron más de lo debido.

-Creeme amor que en el momento menos pensado vas a estar rogándome que no pare y suplicando que te haga llorar de placer- su mirada es tan intensa que me deja sin palabras, mi mente me traiciona al imaginar un escenario donde Rebekah cumple con lo que me está diciendo, haciendo que mi respiración se agite un poco de lo cual ella se da cuenta.

-Yo...- me siento tan nerviosa que no se que decir- olvide que tengo que ir con Caroline- deje dinero en la mesa y me pare para salir de ese lugar, pero antes de irme la rubia me toma del brazo y deja un beso en la comisura de mis labios.

-Nos vemos pronto cariño- me susura en el oído y salgo lo más rápido que puedo de ahí.

Saco mi teléfono y llamo a la única persona con la cual puedo hablar de esto y de cierta forma me entiende.

Marco el número y al tercer tono me contesta- Hola bebé ¿cómo estás?-

-¿Estas en tu casa?- es lo primero que pregunto.

one shot tvdu womenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora