Eran las 6:00 am y la alarma de Christopher empezaba a sonar indicando que su día empezaba, adormilado se levanto a apagar la alarma para después ir al baño y lavarse la cara, cuando termino se dirigió a su gran armario para ponerse un short con una playera holgada.
Salió de su amplia habitación caminado por los enormes y amplios pasillos de su lujosa mansión dirigiéndose a la cocina para prepararse un licuado de plátano, cuando termino de tomarlo puso el vaso en el fregadero y camino a su gimnasio para iniciar su rutina de entrenamiento.
Desde muy joven a Christopher le gustaba cuidar su figura, hacia mucho ejercicio y cuidaba muy bien su alimentación pero no hacia falta decirlo ya que se notaba a simple vista la buena figura que poseía el chico, tenía muchos atributos los cuales hacían enloquecer a cualquiera que lo volteara a ver, tenia hombros anchos, un pecho grande y bien definido, brazos fuertes con unos bíceps de infarto, sus manos era grandes con múltiples venas resaltantes, sin mencionar sus increíbles y bien marcados abdominales, su piel era blanca como la nieve y suave como el terciopelo más fino, tenía una mandíbula jodidamente bien marcada y filosa, sus ojos eran rasgados y penetrantes que con una simple miraba hacia temblar a cualquiera, su voz era ligeramente gruesa pero a la vez era suave, tenia una presencia dominante y su caminar era realmente sexy siempre con la cabeza en alto, su espalda retecta y sus bien marcadas facciones faciales hacían babear a más de uno, sus labios eran rosados y pomposos ¡¡diablos!! cualquier ser humano es sus 5 sentidos se moriría por besarlos pero lo que realmente hipnotizaba a la gente era su hermosa sonrisa decorada por 2 lindos hoyuelos, sin duda alguna era el tipo hombre perfecto para cualquiera.
- Una foto y me voy a bañar antes de que se me haga tarde. – se pone enfrente del espejo y saca su teléfono. –
Después de tomarse la foto se dirigió a su habitación para tomar una ducha caliente, una vez terminado su baño camino hacia su armario para escoger uno de sus múltiples trajes, después de unos minutos se decidió por un traje azul marino que se ajustaba muy bien a su marcado cuerpo, bajo nuevamente a la planta baja y se dirigió al comedor donde ya lo estaba esperando la sirvienta para servirle su desayuno.
- Buenos días señor Bang, ¿le sirvo ya su desayuno?
- Buenos días Jiyu, si por favor, ¿el jardinero ya arreglo los rosales que le pedí?
- Así es señor, me dijo que les había caído un hongo así que las limpio y puso tierra nueva
- Muy bien, a partir de hoy hay que procurar que no se vuelvan a marchitar.
- Si señor se lo diré hoy en la tarde al jardinero, ¿se le ofrece algo más?
- No Jiyu gracias, ya te puedes retirar
- Con permiso señor. – hace reverencia. –
- Propio.
Terminado su desayuno, se puso su saco y se dirigió a uno de sus autos deportivos para dirigirse a su empresa, después de 30 minutos llego al enorme edificio donde fue recibido por todos los empleados con cordiales reverencias, aunque él sabía que muchas de esas eran hipócritas, mucha gente lo admiraba y respeta, pero también habían personas que hablaban mal a sus espaldas.
En una ocasión un miembro de la junta directiva había esparcido el rumor de que embarazado a 3 prostitutas y que a las 3 les dio una gran cantidad de dinero para que se deshicieran del bebé, a la semana siguiente fue despedido y se encargó personalmente de que ninguna otra empresa lo contratara sin mencionar la enorme demanda que le pusieron en su contra por difamación, un mes después se supo en toda la empresa que había quedado en la ruina, el Banco le había cancelado sus tarjetas y al poco tiempo tuvo que vender su casa y su coche para pagar todas las demandas en su contra quedándose en la calle como un indigente, después de eso a todos les quedo claro que con Bang Christopher no se juega.
Al llegar a su oficina lo recibió su secretaria la señora Lee Hyo-ri, llevaba trabajando para él casi 10 años, era una secretaria muy eficiente y no tenía queja alguna pero siempre le pareció que había algo extraño en ella.
Su miraba reflejaba tristeza y a la vez enojo pero jamás le tomo tanta importancia como para preguntarle ni tampoco tenía derecho de hacerlo, después de todo no había nada en su vida que a él le interese o al menos eso creía.
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Amor comprado (Chanlix)
AcakBang Christopher es el empresario mas poderoso y millonario de todo corea a sus 25 años, teniendo en su patrimonio miles de negocios con los cuales a formado una de las fortunas más grandes del mundo, pero a pesar de estar forrado en dinero siempre...