Mitad Demonio.

Cap 27

El pequeño niño pelirrojo miraba el plato de comida puesto frente a su persona, dudando en sí debía ingerir los alimentos.

Miro a las dos personas que se encontraban alejados de su persona, la mujer pelirrosa le sonrió mientras que el de cabellera negra solo lo miro durante un rato, lo cual le asusto.

Sakura: Gaara-chan?
No tienes hambre? ¿No te gusta este plato? Si es así puedo preparar algo que sea de tu gusto, solo dime y yo

La joven no pudo seguir hablando ya que el sonido de sollozos la interrumpió.

Gaara: ¿Yo en verdad puedo comer esto? ¿En verdad puedo quedarme y dormir en una cama?

Obito miro al niño, era alguien fuerte, aquel pequeño sin duda tuvo que enfrentarse a muchas cosas y aun así se mantenía de pie, avanzando como sus pequeños pasos se lo permitían, aquellas personas que le dañaron al llamarlo monstruo, seguramente no se dieron cuenta de cuánto daño le hacían a un ser inocente que lo único que necesitaba era cariño y protección.
Tal vez, si Sakura y él no hubieran podido rescatarlo, tal vez, aquel pequeño terminaría convirtiéndose en un verdadero monstruo.

Un monstruo no nace siéndolo, se crea, bueno, eso es en la mayoría, hay quienes en verdad disfrutan de hacer cosas malas incluso siendo pequeños. 

Escucho otros sollozos, miró en dirección de su compañera, encontrándose con la imagen de esta misma llorando y abrazando con fuerza al pequeño bulto de cabellos rojos.

Sakura: Claro que puedes quedarte, claro que puedes pedir cosas, claro que puedes pedir cariño, yo te cuidare, te voy a proteger aunque me cueste la vida, yo te voy a cuidar pequeño, lo prometo con mi alma, lo juro
Obito: Mocoso, tienes una familia ahora, así que no vuelvas a preguntar cosas como esas, mientras ella y yo estemos vivos nunca te faltara un abrazo o beso de buenas noches, y mucho menos un plato de comida en la mesa...

El Uchiha llevó una de sus manos a su barbilla haciendo ademán de pensar.

Obito: Puede que te lleguemos a poner en vergüenza muchas veces pero solo será porque deseamos demostrarte cuanto te queremos, especialmente ella, peleó bastante para poder tenerte aquí. 

Aquella noche tanto el pequeño niño como la joven lloraron sin poder evitarlo mientras el Uchiha simplemente les pasaba agua y paños, ¿Quería llorar? Eso era obvio pero no lo diría en voz alta. 

Un pequeño niño de cabellera rubia salio corriendo de la academía para encontrarse con su hermana mayor, como le decía él, esperandolo en la entrada junto a un chico que llevaba un mascara de tigre. 

Sakura: Naruto 

La joven se agacho para acariciar la cabeza del menor, fue en ese momento que vio a un pequea silueta acercarse lentamente, de forma timida. 

Sakura: Naruto, deseo presentarte a mis hermanos, él es el mayor 

Obito, quien llevaba la mascara de tigre asintio con su cabeza para luego mirar al frente, dandosé cuenta que Gaara ya estaba con ellos. 

Sakura: Y el es menor de la familia, Gaara-chan saluda 

Al niño rubio se le iluminaron los ojos al ver a los dos nuevos integrantes, el grande parecía super fuerte, se veía tan intimidante, era fantastíco!!!!, el pequeño se veía de su edad, tenía un nuevo amigo. 

Naruto: MUCHO GUSTO, SOY NARUTO AZUMAKI!!!!

Sakura sonrio al notar la alegría del niño rubio, se fijo en el pelirrojo quien se escondía tras Obito.

Gaara: Y-yo me llamo Gaara, mucho gusto 

El pequeño Uzumaki se acerco de forma rápida al niño, mirandolo con felicidad. 

Naruto: Seamos amigos Gaara!!! 

Grito entusiasmado, mientras el pequeño Gaara sentía su corazón calentarse ante aquella propuesta, al fin tendría un amigo, aquello lo hizo llorar de felicidad, acto que alarmo al otro. 

Naruto: Dije algo malo? 

Sakura miro con ternura a ambas, se acerco y los abrazo. 

Sakura: No Naruto, gracias por darle un amigo a mi pequeño hermano 

Obito sonrió ante la escena, no deseaba interrumpirla, no lo hizo, se retiro de forma lenta hasta el lugar donde necesitaban su presencia, salto entre los árboles, concentro chackra en la planta de sus pies para escalar aquel acantilado, saltando al llegar al final, su sombra se cirnió  sobre quienes ahí se encontraban. Una sonrisa adorno sus rasgos al ver las caras que pusieron aquellos ancianos del consejo, su katana fue desenfundada y antes que aquellos dos pudieran intervenir grito. 

Obito: Las ordenes del Hogake las cumplire sin objeción, han osado ir en contra del relámpago amarillo de konoha, paguen con su sangre para limpiar aquel error. 

Una cortada limpia en sus cuellos y aquellas vidas tomo antes de que ellos lo pudieran evitar, conocía a los suyos sabía como se movían, pero a él su respiración le respaldaba, así que cuando aquellos kunnais se dirígieron a su cabeza los detuvo con su sharingan. 

Fue en ese momento que el hokage aparecío. 

Minato: Shisui, Itachi, fui yo quien dio la orden de acabar con los ancianos del consejo..La traición que ellos han ejecutado en contra de la aldea no puede ser permitida, por otro lado, Shisui, confío en tus capacidades para lograr evitar que tu clan se revele en contra de la aldea, no deseo tener una pelea interna, y no me gustaría llegar a tomar medidad drásticas 

Los dos Uchihas se alejaron del ambu, quedando atonitos al observar al hokage tan serio. 

Shisui: ¿Qué pasaría si no lo logró? 

Minato: Los cazadores seran desplegados, y su capitán será el encargado de contener a los Uchiha, y como han visto, sus cortes certeros son letales 

Itachi y Shisui cruzarón miradas con el ambu, viendo aquellos ojos rojos como la sangre, el sharingan, ambos retrocedieron unos pasos al ver como aquel chico limpiaba su katana de la sangre chorreante con un movimiento de mano. 

Por primera vez, se sentían amenazados. 

Minato: Los espero en mi oficina en dos días para saber el informe de su misión chicos,  no tienen permitido matar a nadie de su clan, recuerden aquello, vamonos tigre 

Obito paso por un lado de los dos Uchihas, susurradoles en el oído la siguiente frase ''Como el plan A no llegue a ser exitoso mi katana y yo estaremos listos para separar cabezas de cuellos en un parpadeo, no cometan errores'' Aquello lo dijo mientras pasaba el filo de aquella arma por el cuello de Shisui para luego alejarse al ver como Itachi trataba de atacarlo. 

Obito: Nos vemos niños 

Su sombra desaparecio junto al hokage, los dos chicos se quedarón atrás con los cuerpos sangrantes y sus respiraciones agitadas, aquella tensión, los dejo cansados.