Mina y Sharon, hermanas gemelas que con el tiempo crean un fuerte rencor entre ellas.
Chaeyoung, una trabajadora muy famosa por sus obras, se encontrará con las hermanas Myoui pero no sabe que en realidad son dos.
Quedará muy confundida cuando empie...
Han pasado tres semanas desde lo que pasó y ahora estoy viviendo con mi papá pero como tiene que trabajar me deja sola la mayor parte del tiempo y no me quejo, al menos estoy más tranquila.
Mi embarazo va muy bien, cada vez que acaricio mi vientre recuerdo a la coreana y es que como la voy a olvidar si dentro mío tengo una mitad de la menor.
No he sabido nada de ella desde la última vez que hablamos, pero le voy a dar su tiempo para pensar todo lo que está pasando.
Una visita inesperada llegó a mi casa en la mañana, tocaron el timbre y fui a abrir, la emoción y la sorpresa se encontraba en mi rostro a la hora de ver quién era o más bien quienes y no es para menos, no pensé esta linda visita.
- Hola Nayeon, Jeongyeon, Tzuyu y Sana, que alegría volverlas a ver- dije emocionada abrazando a cada una en cuanto decía su nombre-
- Hola querida Mina- respondió Nayeon correspondiendo a mi abrazo-
- ¿Y ese milagro? ¿Que hacen por acá?- pregunté con sorpresa-
- Pues nos vas a ver muy seguido Mina unnie- está vez hablo Tzuyu-
- ¿Y eso porque?-
- Mi mamá Jeong consiguió trabajo aquí en Corea y nos mudaremos cerca de tu casa Mina unnie-
Estaba muy emocionada y feliz por la noticia, las personas que me ayudaron en mi peor momento estarán más cerca de mí.
- ¡Eso es increíble!- salté abrazándolas fuertemente a cada una-
- Si, Minari- respondió Sana también emocionada- mis padres también vinieron y trabajarán con la señora Jeongyeon en la misma empresa-
- Ahora que están acá podemos hacer muchas cosas, ¿No lo creen? Ir al cine, a comer helado o a cualquier cosa que se nos ocurra y hablar de amores- dijo Sana, todas reímos y las invite a pasar a la casa ya que estaban fuera-
Me gusta la idea de tener a dos amigas cercanas para poder divertirnos y no aburrirme tanto.
Los días siguiente pasaron sin ningún problema, Tzuyu y Sana venían todos los días a charlar y hacer una que otra cosa, nos volvimos mejores amigas e inseparables.
Pasó otra semana y como los días anteriores vinieron Sana y Tzuyu.
- Hola Mina unnie- saludó Tzuyu plantando un beso en mi mejilla-
- Hola Minari- también lo hizo Sana-
- Hola chicas, pasen- las hice pasar y nos sentamos en la sala- ¿Quieren hacer algo hoy?-
- Me gustaría salir- dijo Sana y yo asentí diciéndoles que me esperarán e ir a mi habitación para ponerme un abrigo y salimos-
- ¿Quieren un helado?- pregunté mientras caminábamos por un parque y ellas asintieron-
CHAEYOUNG
Desde el día que hable por última vez con Mina no he vuelto a tener comunicación con ella, quise darme un tiempo y eso hice, pero ya me tomé el tiempo suficiente.
Hace una semana quise hablar con ella más calmadas sobre lo que está pasando pero simplemente no la he encontrado y nadie me dice dónde está. Mi angustia por saber que pasó con ella y mi bebé, y sí están bien aumenta por cada día que pasa.
Estaba paseando por un parque muy colorido para mi gusto, hasta que una silueta me hizo distraer de lo que estaba haciendo, estaba con otras dos personas pero mi atención se la llevó la chica pelinegra.
Al verla de perfil supe que era una Myoui, el problema es que no sabía cuál de las dos era, aunque ya sabía que eran gemelas todavía no las lograba diferenciar y ni hice el trabajo para hacerlo.
Su vista bajó hasta el pequeño bulto que se estaba formado en su vientre y de una supe que era Mina, se veía hermosa con esa pancita en dónde llevaba nuestro hijo dentro y no pude evitar sonreír.
- Eres tan linda Mina, se que eres tú de la que me enamore, siempre has sido tú- dije en un susurro-
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Me acerque lentamente hasta estar a unos pasos cerca a ella, la toqué con mi dedo índice el hombro y ella volteó pegando un brinco por el susto.
