Delirios de amor

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Biu

Ha pasado un mes desde que perdí a mi hija ahora mi vientre esta plano y vacío. Entre sueños escucho el llanto de mi pequeña pero cuando despierto no hay nadie a mi lado; tengo vagos recuerdos de su rostro, de sus manitas y ojitos; mi hija es un recuerdo borroso dentro de mi mente.

Me duele el no poder abrazarla y arrullarla cuando sus sueños se vean perturbados, me duele el no haber cumplido mi promesa de protegerla ¿Qué voy a hacer con todo el amor que tengo en el pecho? ¿Cómo olvidar a mi pequeño cachito de cielo? ¿Cómo dejar de amar? Puede que suene tonto y cursi pero aquella pequeñita era como un manantial cristalino lleno de magia y ternura; ella es una pequeña huella de conexión sublime; ella y yo compartimos momentos tristes y felices pero ahora nos encontramos en polos opuestos.

Aunque me encuentre dentro de una niebla sin luz correré hacia ella y la tendré entre mis brazos. No me importan las amenazas de los señores Sumetikkul porque yo solo quiero a mi hija. Le quiero dar todo el amor que ellos no pueden entregarle; quiero amarla y protegerla como la gema más valiosa del mundo; esa pequeña es mi perla preciada.

-Biu ¿En qué tanto piensas?- negué con la cabeza ante la pregunta de Bible puesto que él sabe lo que mi corazón anhela pero al parecer él desea que olvide todo lo que paso semanas atrás; Bible al igual que todos desea que olvide la existencia de mi hija pero es algo que no puedo hacer, es imposible olvidar a mi pequeña-Mi amor sabes que cuentas conmigo para todo pero por favor no te cierres-Bible me tomo de las manos pero yo las aparte inmediatamente de su toque-Habla conmigo por favor-pero realmente no tengo nada de qué hablar, no tengo nada que decir.

-Déjame solo por favor- Bible intento quedarse y aunque se comparto de manera amable pude notar en su mirada molestia, impotencia y sobre todo tristeza-Biu con tu actitud siento que me estas despojando de tu amor y de tu confianza-de la nada Bible empezó a llorar.

-Estoy cansado...Solo estoy cansado física y mentalmente-respondí sin mirar a Bible.

-Está bien estar cansado, eso no es malo-Bible se limpió las lágrimas de su rostro-Cometí un grave error al permitir que se llevaran a tu hija pero estoy trabajando para recuperarla y no importa perder lo que tengo a cambio de tu felicidad-mi novio se acercó a la ventana y observo atentamente el jardín que se encontraba al frente- El alma humana es tan frágil y en ocasiones esa fragilidad se permea con un mal momento y un mal consejo para que se acabe todo pero siempre existen alternativas para solucionar los problemas...Biu ella estará contigo pero no será algo que suceda de la noche a la mañana...Todo tiene su curso pero por favor no me alejes de ti- Bible deposito un beso en mi mejilla y después salió de mi habitación.

Tiempo es lo que menos tengo y aunque Bible me haga mil promesas sé que al final del día él me abandonara. He tomado una decisión y nadie me detendrá.

Espere a que la noche llegara y al asegurarme de que todos dormían tome las llaves del auto de Time y me puse en marcha. Tengo la dirección de la mansión Sumetikkul y una vez que llegue ahí tomare a mi pequeña y nos iremos lejos muy lejos de todo y todos los que nos quieren separar.

El viaje fue tranquilo pero una vez que llegue a mi destino espere a que los rayos del sol aparecieran por el horizonte. La mañana se hizo presente sin problema alguno y vi salir al matrimonio Sumetikkul de su mansión. No tenían guardias de seguridad ni nada por el estilo así que me cole fácilmente al interior de su enorme hogar.

Recorrí cada pasillo hasta que llegue a una zona llena de habitaciones y entonces la escuche llorar. Mis piernas estaban temblorosas y los latidos de mi corazón se habían acelerado. Camine lentamente hasta llegar a la habitación en donde se encontraba mi pequeña; su llanto me guio hasta ella. Gire la perilla y entonces la vi acostadita en su cuna.

Ella pataleaba fuertemente y parecía querer comerse sus manitas; se retorcía como si quisiera salir de su cuna. Me acerque lentamente hacia ella y la observe detenidamente; quería grabar en mi mente cada gesto y cada rasgo de mi linda niña. Sus cabellos son negros, su piel clara y sus ojos son enormes, sus ojos se parecen a los míos.

La tome entre mis brazos con sumo cuidado y aspire su olor. La coloque suavemente sobre mi pecho; ella hipo y tosió un par de veces así que decidí darle suaves golpecitos en su espalda y al terminar ella suspiro pero lo que más me gusto fue la pequeña sonrisa que me brindo; la bese infinidad de veces pero cuando me disponía a salir una mujer entro a la habitación.

-¿Quién es usted? ¿Qué hace aquí?- la mujer tomo inmediatamente su teléfono-Ponga a la bebé en su cuna ahora mismo- abrace con más fuerzas a mi pequeña y como pude empuje a la mujer para así poder huir con mi hija.

-Deténgase- esta vez la voz de un hombre me detuvo-Entregue a la bebé y prometo no hacerle daño-el hombre me estaba apuntando con un arma-No me haga dispararle...Contare hasta tres- el hombre empezó a contar pero no pensaba en dejar a mi bebé- Es mi hija...Soy su papi- grite con todas mis fuerzas pero el hombre siguió contando, ignoro mis palabras y mi desesperación.

-He llamado a la policía y estarán aquí en pocos minutos- la mujer se acercó a mí-Por favor entrégueme a la bebé...Hágalo por ella- mire el rostro de mi bebé y me partí en mil pedazos-Démela ahora por favor, no le haga daño a la pequeña- seguí observando a mi bebé pero después sentí un fuerte golpe en mi abdomen que me hizo doblarme del dolor. La mujer tomo a mi pequeña y se fue con ella.

No sé cuánto tiempo paso pero después me encontraba siendo esposado y guiado a una patrulla. Los señores Sumetikkul habían llegado y se encontraban hablando con los oficiales. El señor Vegas me miraba de vez en cuando y me lanzaba risas de burla al igual que su esposa. Estoy pagando muy caro el haber aceptado la propuesta de la señora Sumetikkul y ahora no solo perdí a mi hija sino que también mi libertad y al amor de mi vida. Espero que Bible me perdone en el futuro porque no creo volver a verlo.

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Bible

Me levante y duche y al terminar me dirigí al comedor. Time ya había preparado el desayuno y la mesa se encontraba servida-Buenos días Bible- respondí al saludo y me dispuse a desayunar-Time puedes ir por Biu por favor-mis órdenes fueron obedecidas inmediatamente.

Tome una taza de café y la acompañe con una pieza de pan. Extraño las mañanas en donde Biu me sonreía y me contaba sobre sus recetas secretas; extraño platicar con él pero por ahora se encuentra en un estado de media muerte marcado por el dolor y la tristeza. Comprendo su sentir pero su actitud me hace sentir culpable y miserable. Me mira como si fuera su enemigo y eso me duele profundamente.

-BIBLE- el grito de Time me hizo escupir mi desayuno-Biu no está-

-Eso no es posible- un sentimiento amargo golpeo mi alma.

-Ya lo busque en toda la casa y las llaves de mi auto no están en donde las deje anoche- Time estaba en estado de pánico al igual que yo.

-Biu fue por su hija- y esa explicación es la más lógica que tengo a la mano; Biu extraña a su bebé y obviamente no se quedaría con las manos cruzadas-Biu está en peligro...May y Vegas harán hasta lo posible para ocultar todo lo relacionado con su "Bebé"- a estas alturas mi hermano es capaz de cualquier cosa. Vegas ya no es el hermano tranquilo y bueno o tal vez siempre fue malo pero supo ocultar su maldad de todos nosotros.

-Time debemos irnos...Es hora de regresar- no me seguiré ocultando, no dejare que la persona que más amo siga sufriendo.

-Bien pero ¿Iremos a tu antiguo departamento?- literalmente no tengo idea de a dónde ir pero tengo una buena corazonada y es la de dirigirme al hogar del mejor amigo de Biu; tal vez mi novio decida visitarlos y les cuente sus planes.

-Solo ayúdame a entrar al auto y cuando estemos en marcha te diré a donde ir- Time y yo nos apresuramos en salir. Espero que Biu no haya hecho una locura que lo pueda lastimar mucho más. Espero llegar a tiempo para evitar alguna tragedia. Prometí proteger a Biu y eso es lo que hare. Esta vez Vegas y May no se saldrán con la suya, esta vez les pondré un alto definitivo.  

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