Bloodline | ksj. #BabySaga

CAPITULO DIESISIETE

CAPITULO DIESISIETE

Cuando Jin le dijo a Blu que necesitaba ir de emergencia a Corea, ella había dado por hecho de que se trataría de un viaje de negocios de una o quizás dos semanas en las que ella tendría que lidiar con el hecho de estar lejos de él. Sin embargo, cuando a la mañana siguiente una vez se hubiera marchado al hospital para arreglar todo para su viaje, Jin le llamo para pedirle alguna información de su pasaporte Blu comprendido aquello; Jin tenía que ir a Corea del Sur y quería que ella fuera con él.

—Creí que harías el viaje por tu cuenta...—dijo la chica intentando procesar el hecho de que estaba a punto de viajar a la otra punta del planeta para encontrarse con los padres de su novio.

—Quiero que vengas conmigo, quiero que conozcas a mi familia...

Blu quiso preguntar si no creía que era demasiado pronto, pero las palabras se quedaron entre sus dientes. ¿Pronto? Estaba embarazada de su hija, 'pronto' era una palabra que no servía para describirlos.

—¿Qué pasa si no les agrado? —jadeo Blu a su madre mientras intentaba descubrir que vestir para el viaje.

Según la rápida búsqueda que había hecho por Google -justo después de hablar con su jefe y explicarle la situación-, Seúl la capital de Corea del Sur, estaba en pleno otoño y el clima variaba de entre lo mínimamente cálido y lo frio, con días mayormente nublados.

—Tontería, claro que les agradaras, cariño.

—Pero...

—Blu. —su madre paro de doblar el jersey y se acerco a ella. Tomando sus manos la miro. —Eres una mujer encantadora y dulces, no hay forma de que no les agradas y no lo digo porque sea tu madre. Tu y Jin se aman y eso será más y que suficiente para que los padres de Jin te aprecien.

¿Era así? Porque Blu no lo sentía del todo. No solo estaba el hecho de que apenas y sabía escasos datos de la familia de Jin, era le hecho de que estaba a punto de emprender un viaje a un país y una cultura tan opuesta a la suya que temía cometer un error.

Jin no le había dejado del todo claro si sus padres y hermano estaban al tanto del embarazo y ciertamente ella tampoco se lo había preguntado, mucho menos lo había presionado ¿Cómo podría? Jin no había sido paciente y comprensivo con ella en cuanto a como y a quienes les decía de su cacahuate.

Y a mayor razón entendía si Jin quería que hiciera ese viaje. Quería que conociera a sus padres y posiblemente hacerles saber en persona que estaban esperando a su primera nieta.

Después de todo el drama con su madre, Blu comprendía que era mejor hacerlo en persona donde era posible calcular el nivel de riesgo y controlarlo.

Pero eso no evitaba que se sintiera completa y enteramente comida por los nervios.

☁☁☁

El resto del día Jin la paso fuera de casa arreglando todo en el hospital antes del viaje. Ajustes de calendario, programaciones de futuras operaciones, entre otras cosas. Libero el espacio necesario para poder ir a casa sin preocupaciones, más que darle a su familia la gran noticia.

El vuelo estaba programado para la media noche, así que cuando llego al departamento pasadas las siete de la noche apenas tuvo tiempo de alistar una pequeña maleta y asegurarse de que Blu tuviera todo.

Normalmente, esos viajes de emergencia consistían en básicamente salir corriendo de casa con apenas lo necesario, pero esta vez era diferente. Esta vez no iba solo, iba con Blu y su hija.

—¿Están seguros de que no quieren que los lleve al aeropuerto? —pregunto la madre de Blu mientras Jin llevaba las maletas a la puerta del departamento.