𝗠𝗔𝗡𝗜𝗣𝗨𝗟𝗔𝗧𝗜𝗢𝗡 || ᴬˡⁱᶜᵉ ⁱⁿ ᵗʰᵉ ᴮᵒʳᵈᵉʳˡᵃⁿᵈ(PAUSADA)

𝗖𝗵𝗮𝗽𝘁𝗲𝗿 𝗦𝗶𝘅

𝗖𝗼𝗺𝗲 𝗜𝗻𝘀𝗶𝗱𝗲 𝗢𝗳 𝗠𝘆 𝗛𝗲𝗮𝗿𝘁 - IV Of Spades

Yue abrió lentamente sus ojos al sentir los rayos del sol sobre su rostro y sonrió al ver a Chishiya sentado en la cama mirándola.

-¿Tengo algo en la cara?-

- No, solo te quiero ver.- Dijo acercándose a su pareja.- ¿Eso es un problema para ti?-

- No.- Yue se sentó para abrazarlo con fuerza.- Debemos bañarnos.-

- Lo sé pero no hay agua.-

- No hay electricidad, sin embargo en el juego de ayer todo era tecnología.- Chishiya hizo que Yue se recostara para abrazar sus caderas, era una pose extraña que Chishiya solía tomar al estar con la castaña.

- Si, llegué a la conclusión de que tendremos que buscar aparatos que no sean como los que tenemos aquí.- Chishiya dejo un camino de besos por el abdomen de Yue antes de seguir hablando.-  Los aparatos con chips integrados están muertos, cualquier aparato que no tenga chip o que opere por panel eléctrico no funcionará.-

Yue se levantó de la cama dejando a Chishiya sentado.

- Te besaria, pero no nos hemos lavado los dientes.- La expresión de Yue al decir eso hizo que Chishiya riese.

- Bien, iré por Aiko.-

- Yo iré a cepillar mis dientes y ver si el agua embotellada es suficiente para todos.-

Chishiya caminó hasta su habitación para despertar a la pequeña niña que prácticamente habían adoptado.

- Buenos días.- Dijo la niña que se encontraba en el suelo atando sus zapatos.

- Buenos días.- Chishiya iba a cerrar la puerta al ver que Aiko ya estaba despierta pero su voz lo detuvo.

- Espere, señor le quería agradecer a la señorita Yue por ayudarme ayer.-

- Estoy seguro de que para Yue fue un placer, ella se dedica a salvar niños.- Chishiya finalmente salió de la aviación y se recostó en el pasillo para ver como Yue se cepillaba el cabello y le sonreía al notarlo ahí.

Las imágenes de Yue en la sala de pediatría llegaron de la nada. Chishiya veía todos los días como Yue jugaba con los niños, pintaba con ellos e incluso les leía libros para que ninguno de esos niños se sintiera solo y el también participó en muchas de esas ocasiones. Chishiya y Yue eran de los doctores más queridos por los niños, por lo que les afectaba bastante cada ves que un niño fallecía.

El recurrente recuerdo de Yue llorando por tener que mentir a familiares de niños sabiendo que era muy posible que muriesen. Chishiya no odiaba su trabajo pero odiaba que Yue fuese la que tuviese que sufrir y ni hablar de cuando le dio un ataque al corazón y necesito ese transplante.

Yue era tan pura y hermosa con sus sentimientos que Chishiya aveces sentía que estaba soñando al estar con ella y es que todo en ella era precioso. Su forma de hablar, caminar, reír, pelear, sus emociones y la forma en la que se podía llegar a expresar o en que sabía que tampoco lastimaria ni a una mosca.

Uno de sus pensamientos al ver cómo su novia se enojaba de vez en cuando era lo increíble que sería que Yue lo tomara y se desquitase con el como ella quisiera, pues el lo permitiria y es que Chishiya amaba a Yue.

- Es muy bonita.- Dijo una voz a las espaldas del rubio.

- Lo es.- Chishiya le dio la razón a Kuina.

Yue se acercó hasta donde ambos estaban.

- Quiero hablarles de algo.- Dijo Kuina seriamente.

- Adelante.- Dijeron el rubio y la castaña a la vez.

- Yo estoy en una utopía llamada "La Playa"  ellos se encargan de juntar las cartas y encontrar una forma de salir.-

Chishiya y Yue se miraron, estaban considerando la oferta.

- Nuestra carta, eso es lo que quieren.- Dijo Yue segura.

- Si, ya tenemos muchísimas pero si en su primer juego lograron el ocho de corazones y además con la mayoría de los jugadores vivos, creo que serían de mucha ayuda.-

- ¿Están seguros de que esa es la forma en la que lograremos regresar?- La pregunta de Chishiya y el silencio de Kuina hicieron suspirar a Yue.- Entiendo, no lo sabes.-

- El sombrero dice que ningún jugador podría juntar las cartas solo, así que es más que obvio que debemos hacerlo en grupo.-

- ¿Sombrerero?- Preguntó Chishiya pues el nombre le pareció estupido.

- Tengo una idea.- Dijo Yue evadiendo de sus pensamientos al sombrerero.

- Soy toda oídos.-

- Si llegará a ser cierto, podríamos hacer un plan para quedarnos con las cartas.- Planteo Yue su idea.

- Muerte al traidor, es una de las reglas de la playa.- Intervino Kuina.

- Nadie tiene porque enterarse.- Dijo Chishiya.

- Enfoquemos en esas cartas muy altas o las que falten para ser más confiables en la playa, luego veremos como robar las cartas.- Continuó Yue

- Dios eso es suicida, no puedes esconder las cartas. Todo es de todos y no hay cerraduras por lo que si alguien nos descubre estaremos muertos.- Kuina parecía pensarlo con algo de preocupación.

- No nos quedaremos las cartas, entregaremos todo y seremos ejemplares.-

- Luego encontramos la forma de robar las cartas y nos iremos sin que nadie lo sepa.- Terminó Chishiya por Yue, pensaban igual y eso a Kuina le divertía a la vez que le asustaba.

- No los quisiera de enemigos.- Pensó la chica de rastas en voz alta.

- No te haces una idea.- Murmuró Chishiya, Yue sabía que bromeaba pero Kuina no y en definitiva se asustó.

- El sombrero los va a adorar.-

- Ya enserio¿quién es ese?- Preguntó Chishiya para recibir una risa de la chica que amaba.