Modelo

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Cuando Niki inocentemente llegó a la empresa todo estaba hecho un desastre.

Literalmente.

Estúpido SungHoon que no lo había despertado para llegar a tiempo.

Todos se veían realmente ocupados, estresados, ansiosos, yendo de un lado a otro, haciendo llamadas, respondiendo correos o simplemente repartiendo café para todos los muchachos que se movían de forma rápida para intentar acabar algún trabajo que el rubio desconocía. Niki miraba sorprendido el ritmo acelerado que mantenía tensa a la oficina mientras se dirigía confundido hasta su puesto de trabajo, encontrándose en su camino con JungWon, quien casi le pasa por un lado sin siquiera saludarlo.

—Hey, hey, Won ¿Qué pasa? —El rubio lo detuvo e interrogó con confusión, teniendo que poner una mano en su pecho para que realmente se detuviera.

—¿No te enteraste? —Niki negó con su cabeza—. Yeonjun, el modelo que debía tomarse las fotos de hoy, fue captado por los paparazis saliendo de acá con una mujer.

Niki abrió sus ojos en grande.

Un escándalo en la empresa, ya entendía por qué el alboroto.

—El CEO dijo que no quería usar al centro de un escándalo para los pósters promocionales de su producto, básicamente nos puso a buscar un modelo de último momento.

—Oh, mierda, ¿Encontraron a alguien? —JungWon negó con la cabeza—. Entonces supongo que también tengo trabajo que hacer.

El más alto asintió antes de irse a su respectivo lugar por el llamado de uno de sus superiores.

Nuestro rubio por otro lado estaba por sentarse en su escritorio, dispuesto a apoyar la búsqueda de algún modelo que salvara el contrato de millones que tenían en juego, cuando Ryujin, la secretaria de su director favorito, se acercó a él.

—Niki-ssi, el director Park quiere verte.

El mencionado asintió como respuesta y junto a la muchacha de cabellos azules se encaminaron hasta la oficina del superior en donde estaba el aludido director, con varios papeles desordenados cubriendo cada superficie antes libre en la madera oscura de su escritorio y una persona desconocida de brillantes cabellos rubios sentada frente a él, de espaldas al recién llegado.

Ryujin fue la que le permitió la entrada al pelinegro, abriendo la puerta y haciendo una reverencia que fue ignorada por el abrumado superior antes de retirarse inmediatamente para volver a su puesto. Niki entró de forma involuntariamente discreta, teniendo que anunciarse para obtener atención en el lugar, haciendo la conocida reverencia cuando finalmente había sido captado por el director y aquel hombre de extravagante vestimenta que parecía sorprendido de verlo cuando se giró para ello.

Al rubio se le hacía conocido, pero no sabía muy bien de donde.

—¡Niki-ssi! —Exclamó SungHoon en cuanto lo notó—. Al fin llegas, escucha, necesito que llames a estas empresas y-...

SungHoon se había levantado de su asiento con prisa a la vez que hablaba apresurado, acercándose al menor y a punto de entregarle su trabajo asignado, agradeciendo enormemente su sencilla presencia en el lugar, pero antes de poder hacerlo fue interrumpido por el otro hombre presente, quien jadeó impresionado y acabó confundiendo a los más jóvenes cuando sus ojos brillaron como si hubiese encontrado un tesoro escondido.

—SungHoon, no llames a nadie —canceló el que parecía mayor que mientras que con asombro se levantaba de su lugar y se acercaba hasta el rubio, detallando cada una de sus facciones—, encontré el modelo que necesitábamos.

Y Niki no supo qué sentir cuando el mayor de cabellos rubio dijo aquello mientras le miraba fijamente.

(...)

៛ Lion ៛  HoonKi₹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora