❛ florencia, desde el primer dia en el que te vi me cautivaste y no me importo que tu hermano sea el kun agüero. ❜
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el arbitro pitó el silbato y yo no caía, estábamos en la final.
después de tanto sufrimiento teníamos la posibilidad de ser campeones del mundo. Era increíble.
con mi familia nos empezamos a abrazar y llorar.
después de un rato nos dijeron que podíamos ir a ver los jugadores.
esperamos y cuando nos dijeron que podíamos ir yo fui con dibu, a quien abracé feliz.
— Te felicito! lo tenes más que merecido. — felicité llena de emoción.
— Estamos en la final flo, no lo puedo creer. — me miró lleno de felicidad.
— te lo recontra mereces, merecen salir campeones. — agregué y me abrazó con mucha más fuerza.
— te amo flo, gracias. — soltó y no lo podía creer. Me dijo te amo.
— yo muchísimo más. —dije.
después de hablar con emi, fui con Leo y lo abracé.
— ¡Viste que ibas a llegar a la final boludo! te dije, y estoy re orgullosa de vos. — felicite con los ojos llorosos.
— gracias Flo, todavía no lo puedo creer. — me agradeció messi, se le notaba en su cara la felicidad.
abracé a anto también y salude a sus hijos que estaban felices de verme.
el kun se quedó un rato más enganchado a leo, parecía el amante.
yo me fui con dibu y seguimos hablando.
— acabo de notar que tenes mi remera vos, te queda hermosa. — alago emi.
— la tenia que usar, era una obligación. ¿Y tus hijos? — pregunté por los dos chiquitos.
— Están con la madre, más tarde vienen. — me comentó.
— tengo ganas de conocerlos, ¿es muy rápido no? — pregunté arrepintiendome de la pelotudez que dije.
— puede ser, pero ya vamos saliendo hace un rato largo. Yo con la mamá de ellos tengo la mejor y no va a tener problema, ahora cuando vengan quédate conmigo y los conoces. — me dijo y me sentí muchísimo más tranquila.
después de un rato de estar todos juntos cada uno se iba a hacer las suyas, pero emi y yo íbamos a ir a ver a los hijos de él.
estábamos esperándolos en un café cerca de el hotel donde se estaban quedando los jugadores. En eso vimos llegar dos chiquitos y supimos que eran ellos.
— hola chiquitos! los extrañe — hablaba dibu abrazando a sus hijos, y atras estaba su mamá.
yo me quede sentada donde estaba, no quería meterme en el momento familiar.
en eso se me acercó mandinha, la ex mujer de emi.
— hola, que tal? — me saludó.
— hola, un gusto conocerte. — mostré agrado, no quería caerle mal.
