☢︎︎N̶E̶W̶ V̶I̶R̶U̶S̶

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Realmente estaba preocupada por mi inactividad y atraso.
Hasta siento feo que ya están olvidando esta historia por mi culpa :(.

Asi que les traje un capitulo y a la siguiente semana subiré más.

_Yas–minnie

Últimos capítulos

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Lo que más temían se estaba cumpliendo, tras tener que llevar mascarillas, el oxígeno limpio estaba disminuyendo y la probabilidad de contagiarse era alta, huyendo de lo que llamaron hogar era lo más difícil dejando a sus compañeros atrás deseando que pudieran encontrar paz en su vida.

Y es que tal vez el virus ya estaba actuando demasiado rápido.

—Tenemos poco tiempo para irnos de aquí, no debemos perder más tiempo... Estoy seguro que no están esperando. — Yeonjun afirmó tomando el arma de la mesa.

—No voy a negar que estoy preocupado por ellos, pero.... Espero que encuentren la paz que han querido. —dijo soobin en apoyo a sus compañeros en su decisión.

Los demás asintieron, quedaba poco para largarse de ese lugar de una vez por todas, Yeonjun miró a los ojos a soobin y este solo le sonrió generandole confianza, cargo a su hija para llevarla en su brazos pues tenían que actuar rápido y su pequeña podría ser atrapada por esas cosas.

—Saldré primero. — Respondió el militar, saliendo del sitio con el arma.

Abrió la puerta de forma silenciosa, la calle estaba vacía pero no podían estar seguros pues la niebla y el aire contaminado opacaba la vista, el camina saliendo haciendo el mínimo ruido posible, las criaturas deformes que alguna vez fueron humanos tal vez no los verían por la niebla; los demás salieron al instante haciendo lo mismo, tampoco sabían a dónde avanzarán porque no se podía ver nada, aún así podían guiarse con los ruidos.

—Papi, los infectados están en la otra calle. — murmuró jeong anh, siguiendo sus instintos.

Soobin confiaba mucho en su hija, después de todo tenía el virus, además de que ella había predicho lo mismo en el hospital, y en varias ocasiones.

—Junnie....tomemos la otra calle. — Rogó soobin al mayor.

El alfa comprende la situación tras escuchar un fuerte gruñido, lo que querían era evitarlas, su arma no era suficiente para matarlas, aquellas cosas ya no eran normales para nada su aspecto era horrible, altos como de tres metros, piel pálida, sin ojos y con unas garras que romperían la cualquier cosa con ellas. Guió a los demás a la otra calle siguiendo el instinto de su hija, ella les daba indicaciones de donde podrían irse para evitar esas cosas.

Era sorprendente que con sólo cuatro años ella entienda la situación y hable de forma clara, la cachorrita solo quería que sus padres estén bien sin que esas cosas les haga daño. En pequeño Changsun estaba plácidamente dormido, tener al recién nacido y que pueda llorar en cualquier momento era una situación que les tenía preocupados.

Jeong in cargaba al bebé, y hyunjin a yeji quien por el miedo se escondía en el cuello de su padre, sin querer mirar alrededor.

—Podríamos ir caminando hasta el muelle pero encontrarnos con esas cosas es peligroso. — Hablaba entre susurro hyunjin.

—Creo que es la única opción que tenemos, no podemos ver nada de todas maneras, y no hemos tenido éxito en encontrar trasporte. — afirma yeon.

Mientras tanto se habían detenido al escuchar infectados al frente, estos por obvias razones no podían verlos, pensaron que pasaron desapercibido cuando uno de ellos extendió su gran brazo arrastrando a yeonjun entre la neblina, soobin tanto los demás corren a seguir aquella cosa, la neblina dejaba de ser menos densa.