Joseph.
Era el día.
Hoy me amanecí con ganas de matar gente. O bueno, mejor dicho...con ganas de matar a la minita esta, la Carla.
Supongo que ya lo estaba alargando mucho, aparte era navidad.
Feliz navidad, Camilo.
Estaba preparando todo para poder hacerlo todo un espectáculo. Aunque bueno, en realidad esta mina se merece morir de la forma más solitaria posible.
Tampoco quiero torturarla mucho, sinceramente me sentiría mal conmigo mismo haciéndole eso a una mujer, por muy mala que sea la mina.
Así que será rápido.
Pero eso no quiere decir, que sea menos impresionante.
La verdad es que siempre me ha gustado dar buenos shows, me gusta la atención.
Claramente nadie sabrá que fui yo, por supuesto.
Así que por eso, estaba en la azotea de un edificio que estaba en una zona súper concurrida. Me había asegurado que nadie estuviera abajo, así que...
—Carla, ¿por qué no te acercas?—la llamé. El tipo de seguridad que la tenía, la acercó a donde estaba yo.
La dejó a la orilla del edificio, aún la tenían sostenida para que no se le ocurriera tirarse o escapar.
—¡¡Mi familia te va a matar, weon!!—me grito eso por quinta vez, ay como le explico...
—Bla, bla, bla.—me burlé.—¿Tus últimas palabras?—enarqué una ceja, mientras levantaba la pistola para apuntarle.
—Dile al Seba que lo am...—no la dejé terminar. La bala impactó directamente en su frente. Mi agente de seguridad la soltó, por lo que la weona calló desde lo más alto.
Me encantan los finales felices.
—Okey, ¿alguien quiere ir a almorzar?—les pregunté cuando ya íbamos bajando.
✍︎ ✍︎ ✍︎
Cristóbal.
Conchetumare.
Estaba viendo las noticias, estaban mostrando que encontraron un cuerpo de una mina todo destrozado en una calle que estaba cerrada.
Era la tía del Alexander con él Alejandro.
Mi tío la había matado.
No me daba pena, por supuesto. Yo sabía lo mala que era esa mina...pero aún así me impacta que mi tío mate gente.
Bueno, tampoco es que no lo supiera. Simplemente me sigue impactando.
Era navidad, ayer durante nochebuena la pasamos con la familia del Martín y de la Vale. Hoy, vinimos todos a ver a la Luz con él Víctor.
El último, se está mejorando con creces. No ha rechazado el riñón de la Luz, y esperemos que siga así.
—Estoy muy feliz, por fin mi amiguita podrá salir de aquí.—dijo emocionada, mi polola. Yo le sonreí.—Espero que él Víctor pueda irse luego, también.
—Sus papás me dijeron que en un par de días ya podría irse, le falta poquito igual.—dijo con emoción también, mi hermano.
—Ojalá que sea así.—suspiré.—Así podremos salir de esta pesadilla culia luego.
—Sí...—la Vale hizo una mueca.—¿Vieron las noticias?
—Si weon, tú tío se lució.—dijo bajito él Martín.
ESTÁS LEYENDO
quiero que seai tú
Teen Fiction[chilensis] cuando su mina la cagó, la valentina no quería saber nada más sobre relaciones, pero ¿ella qué iba a saber que se engancharía del cristóbal?
