Anastasia La Rossa
Un nombre que quedo en el ovlido,un nombre al que fui obligada a renunciar.
Aquel dia que perdi a mis padres,a mi hermana,a mis hermanos,a mi amor,mi hogar,mi titulo,mi futuro,mi libertad.
Me secuestraron me obligaron a renunciar...
"Soy la Sultana Hurrem, madre de cinco hijos del Sultán, su favorita, su mujer y su futura esposa"
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La pequeña Mihrimah Sultán era cargada por su padre el Sultán Suleimán quien sonreía al tenerla en brazos recitándole un poema.
-Mi Sultana, mi sol, mi Luna, mi hija más amada- Suleimán le recitó y miro a su amada rosa.
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Hurrem Sultán sonrió al escuchar las palabras que el Sultán le decía a su hija.
-Nuestra hija hermosa Majestad- le comentó Hurrem.
Suleimán le dio la mano y posteriormente acarició su mejilla.
-Una hermosa Sultana igual que su madre.
-Su Majestad- saludo Ibrahim entrando a la habitación.
Suleimán sonrió a su amigo y le dio una seña de que hablará.
-Los hijos del Pasha Ahmed están aquí.
El Sultán había pensado en casar a su hermana Hatice, quería casarla con el hijos menor de el Pasha Ahmed.
El Sultán ordenó que Mihrimah fuera devuelta a sus aposentos que se había dormido escuchando el poema de su padre y ordenó que entrarán.
Ibrahim ordenó que los hijos del Pasha entrarán, entraron tres jóvenes. Cuando los observo bien sus ojos se cristalizaron y la boca se le abrió con sorpresa pero rápidamente volvió a su rostro normal, esos muchachos eran sus hermanos de su antigua vida.
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