13.

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RED.






—Pero si es mi campeona favorita.

Hundo mi cejas viendo de reojo como se acerca Will con sonrisa de inocente, deje de golpear el saco y me volteo ligeramente para ver lo frente mío con Al detrás de él.

—No pienso volver a tomar con ustedes, malas copas.

Will se muestra ofendido. —¡No venimos por eso!

Sonrió levemente. —¿Entonces?

Balbucea nerviosa. —Bueno, sí... Pero me ofende que me tomes por un mala copa.

Al ríe detrás de él mientras se recarga viendo la situación, ruedo los ojos y me cruzo de brazos divertida.

—Es día de pelea Will, no voy a tomar ahora...

Me interrumpe. —Pero no me refería a que ahora, campeona. —ruedo los ojos por mi nuevo apodo.—Se que hoy es día de lucha, pero, no solo eso, es la última lucha indicando que la primera etapa se acaba, campeona.

Entre cierro los ojos haciendo que me dé su mirada de suplica, esa que me dio el otro día para que tomáramos en el descanso, pero no estoy de ánimos para caer es sus berrinches.

Y pareciera que notaron mi falta de ánimo por qué Al se le unió al convencimiento.

—Venga Red, es solo para celebrar.

—¡Sí! Exactamente, y si te hace sentir mejor, no tomaremos, solo vamos al pozo a divertirnos ¿Sí?

Bufo viendo su rostro de suplica.

—¿Sí les digo que sí me dejaran  ya para entrenar?—Asienten ambos a lo que suspiro. —Okay.

—¡Eso, campeona!

Procedieron a abrazarme alegres y se pusieron a un costado mío con los otros sacos para estirar mientras volvía a golpear el saco con mi mano sana, aún no puedo hacer movimientos peligrosos con mi muñeca lastimada y no quiero perder la mano por mi terquedad.

Los chicos empiezan a golpear los sacos mientras platicaban animados y de vez en cuando se molestaban entre ellos amistosamente haciéndome sonreír ligeramente por su presencia. Desde ayer por la noche no me estaba sintiendo precisamente bien.

Después de lo de Peter me quedé sentada viendo el pozo por horas, sentía mi mente muy nublada por todo lo que había sucedido y no paraba de torturme recordando las veces en que Peter se la pasaba burlándose y liandose conmigo para molestarme o cuando luchamos la primera vez... Recordé las pesadillas que tenía y la impotencia y frustración que él creo en mí.

Pero entonces recordaba su mirada débil y esos besos tiernos que depósito en mis heridas, en las heridas que él hizo... Ese beso lento que me dio antes de separarme, como si tuviera miedo de que se acabará, es algo que no he dejado de pensar.

Por qué jamás creí que él haría eso.

Vi una parte de Peter Hayes que pensé no existía.

Y no se sí sea real, me da miedo ¿Qué tal que solo está fingiendo? ¿Y si esto es solo un plan para distraerme? No puede ser real.

𝗥𝗘𝗗. | 𝗗𝗶𝘃𝗲𝗿𝗴𝗲𝗻𝘁𝗲.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora