Lonely

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Colette y Duncan iban de camino a Rusia.

La francesa tenia una casa alejada de la ciudad en su poder, una de las pocas cosas que habia comprado con el dinero de su trabajo que valiera la pena. Era demasiado joven para pensar en asentarse en algun lugar, pero el dia que la compro por alguna extraña razon su instinto le habia dicho que era justo y necesario. Sonrio al recordarlo. Quizas para el momento en que dejase de trabajar o... para momentos como estos. Le dio las gracias a ella del pasado.

Miro a Duncan quien estaba mirando al frente, siempre tan serio y sin decir muchas palabras.

Ya tan solo quedaban veinte minutos para poder llegar. La chica ordeno sus cosas en su bolso y se puso el gorro que llevaba en las manos para usar al momento de bajar, junto con una bufanda. El simple movimiento hizo que la herida en el abdomen le punzara como mil cuchillos. No demostro gesto alguno, no queria preocupar a Dunca y que hiciera apresurar el vuelo.




.....

Pasaron los veinte minutos y el avion toco tierra.

Colette bajo primero seguida muy de cerca de Duncan, al posicionar su segundo pie en el suelo el dolor se puso mas pesado, ya no podia seguir disimulando; se habia doblado del dolor. Duncan no se preocupo, hizo algo mejor, se cargo su bolso y el bolso de ella cruzado por el pecho y hacia atras, se quito el abrigo, se lo puso a ella encima de la chaqueta que tenia puesta y la cargo cual coala a su cuerpo.

-Aprieta mis caderas con tus piernas, Colette -ordeno. Ella le hizo caso y tambien se aferro a el con los brazos por su cuello. Duncan subio las solapas del abrigo tapandole aun mas el rostro y emprendio camino a traves de la oscura noche hacia la direccion que Colette le habia dicho antes de viajar. Conocia bastante bien Rusia, por lo que, cuando ella le dio las coordenadas ya sabia de que lugar se trataba. El viento pegaba fuerte. Era un camino largo que requeria de transporte pero Duncan habia decidido caminarlo.

¿Por que le importaba tanto esa chica que habia conocido un dia cualquiera? ¿por que se habia involucrado? aun peor, ¿por que estaba dejando de lado una jubilacion tranquila por querer ayudar a una chica que ni siquiera sabia si era buena o mala? El habia salido de un momento tormentoso en el que habia quedado con secuelas y volvia a caer en otro, al igual que un dejá vú.

Pues, por la simple y logica respuesta... No podia dejar que una chica a su edad tuviera que pasar por lo mismo que él habia pasado. Esta bien, ella se lo busco al entrar en ese mundo, pero era lo unico que conocia. No le puedes pedir ser independiente y diferente a una chica que fue abandonada a una temprana edad por sus padres. Y que la intenten asesinar a sus veintiocho años no era justo, lo era para un hombre como él de sus cincuenta y tantos años. No para una chica tan joven.

Pasaron las horas y Duncan habia llegado.

-Colette -dijo alejandola un poco de su cuerpo, bajando las solapas. -Hemos llegado, necesito tu huella dactilar.

-Esta bien -respondio con pocas fuerzas, la chica se encontraba palida. Duncan la acerco al lector y ella puso su dedo indice. El aparato hizo un sonido y la reja corrediza se empezo a mover desde el lugar donde estaban ellos hacia el lado opuesto, al minimo espacio Duncan se metio y la reja se volvio a mover a como estaba antes sin la necesidad de tocar algun boton.

Camino por el largo cesped hasta llegar a la entrada. Colette le dio la clave junto a la puerta; 1-9-6-5. La puerta sono y esta vez no se abrio, Duncan tuvo que empujarla con el cuerpo para poder entrar.

-Desactiva los rayos antes de seguir avanzando, Vizla -comento la francesa. Al otro lado de la puerta se encontraba el mismo tablero. -He cambiado los botones, toca el verde para desactivar.

Dream On 😈Duncan Vizla& Colette Dubois😈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora