Viernes 4 de diciembre; 19:52

312 35 0
                                    

Las cinco estaban en la fiesta sin varones que había organizado Iben.

Aunque, en realidad, el ''sin varones'', era completamente mentira. Sí habían invitado a los varones de primero. Mia miraba fijo, sin pestañear, incrédula, al chico que estaba haciendo freestyle. Eso, solo podía soportarse con cerveza. Pero, sacando ese momento raro, la fiesta no era mala.

Se tiró sobre las piernas de Noora y tomó una selfie de ellas dos con los gorros rojos de navidad.

— ¿Saben algo de Vilde? —les preguntó Sana, sacando las caras feas que hacían para la foto de Snapchat, negaron.

— ¡Han llegado más chicos de primero! —exclamó Iben y todas lo vitorearon. Entre ellos estaban Isak y Magnuss.

No pasaron muchos minutos hasta que el timbre volvió a sonar. Esa vez, era Vilde. Había llegado, pero muy ebria. Menos tiempo pasó hasta que se desmayó.

— ¿Qué pasó?

— ¡Vilde!, ¡Vilde!

— Entró, se tambaleó y luego se desmayó. No responde —le explicó Mia a Eva, alterada.

Pasaba de nuevo. Vivía lo mismo desde otra perspectiva. Cómo no alterarse.

— ¿Tu mamá está en tu casa? —le preguntó Sana a Eva.

Eva negó. Entonces, entre todas la levantaron y la llevaron a casa de Eva. Vilde no reaccionó sino hasta que Sana le metió los dedos hasta la garganta, hacían todo como les indicaba la operadora del número de emergencias. Luego vomitó a Sana y se rieron, todas menos Mia, que estaba pálida debido a la preocupación.

La acostaron en la cama de Eva, todas se acomodaron como pudieron para poder dormir, y cuando ya habían apagado las luces, Vilde dijo:

— Creo que mate al bebé de William esta noche.

Volvieron a prender las luces, mirándose las unas a las otras. ¿Qué iban a hacer?


Sábado 5 de diciembre; 10:21

Vilde de despertó última, pero justo para desayunar. Noora terminaba de preparar los panqueques. Todas se sentaron en la mesa del comedor, intentaban que la tensión no se notara, pero no tenían idea de qué decir o por dónde empezar.

— ¿Quieres jugo? —negó.

— ¿Mia?

— Comeré uno, gracias —pasó su plato y Noora le sirvió—. ¿Alguna quiere té?

Vilde no hablaba, no reaccionaba.

— ¿Quieres mermelada? —le preguntó Noora.

— No recuerdo nada de ayer —dijo al fin.

Después de un segundo silencioso, Noora apaciguó sus preocupaciones:

— No pasó nada. Estuvo bien.

— Los blackout son la manera que tiene Dios para decirte que no te preocupes de nada, Vilde —agregó Chris, llevándose miradas negativas de todas.

— No. Son la manera en la que tu cuerpo dice basta, Vilde. Pero... de todas formas, es cierto, nada pasó —intervino Mia—. Nada especial. Al llegar a casa de Iben, te desmayaste y nosotras te trajimos aquí.

— Además, cualquier chica que se respete ha tenido un blackout alguna vez —dijo Eva, llevándose las mismas miradas que Chris.

— Gracias —respondió casi en susurro—. Es en serio.

𝐀 𝐁𝐚𝐝 𝐋𝐢𝐚𝐫 | SKAM 》William MagnussonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora