Narra Aonung:
Ya era de tarde y Leah se había ido a su choza para hablar con sus padres ya que le habían llamado, justo como a mi.
Ronal: ¿Cómo se te ocurre besarte con aquella mestiza?-su pregunta me sorprendió-
Aonung: Madre yo nunca me he besado con Leah
Ronal: No he mencionado a Leah Aonung, me lo acabas de afirmar tú solo
Tonowari: Hijo sabes que esa relación sería imposible
Aonung: ¿Por qué?
Ronal: Porque ella es una mestiza
Aonung: Es una Na'vi eso no tiene nada que ver
Tonowari: Hijo entiéndelo, no es una Metkayina
Aonung: Pero está aprendiendo nuestras costumbres
Ronal: Dejarás de enseñarle y mientras esté con Tsireya tú no te acercarás a ella, no voy a permitir esa relación
Aonung: No me podéis prohibir esto
Tonowari: Es la mejor decisión
Aonung: ¿Para quien? Porque para mi la mejor decisión es estar con ella
Ronal: Si quieres que su familia se quede aquí dejarás de verla y le dirás que no quieres volver a saber nada más de ella. Es por el bien de la familia
Aonung: Solo lo hacéis por vuestro bien
Tonowari: El de todos hijo, compréndelo
Aonung: ¿Cómo os habéis enterado?
Ronal: Zian nos lo ha dicho, ahora vete a hablar con ella
Aonung: Os odio
Mis padres no me pueden hacer esto, desde que ha llegado Leah he dejado de ser tan inmaduro como era antes, hasta le hablé de ella a mi hermano espiritual. Me senté en la arena, necesito pensar. Me va a doler decirle esas cosas a Leah.
Leah: ¿Otra vez solo?-me sonrió-
Aonung: Tenemos que hablar-la miré seriamente-
Leah: ¿Qué pasa?
Aonung: No te quiero
Leah: Aonung, ¿qué dices?
Aonung: He estado jugando contigo porque solo quería besarte, pero nada más. Solo te considero una mestiza-me duele decirle esto-
Leah: Me dijiste que no estabas jugando conmigo-noté sus ojos a punto de llorar-
Aonung: Pues no tendrías que haber confiado en mi-me pegó una bofetada-
Leah: Eres un imbécil Aonung-se fue a su choza-
Me tiré frustrado en la arena, no sé que acabo de hacer. No quería decirlo, pero necesitaba que se quedara aquí. Nunca la había visto así, mostrando sus emociones.
Tsireya: Padre y madre me han contado lo ocurrido, lo siento
Aonung: Me odia
Tsireya: No creo que te odie, está muy molesta
Aonung: No entiendo porqué me dijeron que hiciera esto, cuando empiezo a sentir algo por alguien y me lo prohíben
Tsireya: Deberías de hablar con ellos
Aonung: Lo he intentando pero no razonaban y menos madre
Tsireya: Mañana le preguntaré por ti y cómo está
Aonung: Encima me han prohibido estar junto a ella, bueno de todas formas si me acercase a ella me pagaría una bofetada. Ya van 2
Tsireya: Aonung esto se arreglará, ya lo veras
Aonung: No lo sé
Volvimos a la choza y ni siquiera he dirigido la mirada a padre y madre.
Tonowari: Hijo ven a comer
Aonung: No tengo hambre, voy a descansar
Ronal: No seas infantil
Aonung: No soy infantil, vosotros sois los que me prohibís estar con alguien a quién quiero
Tonowari: Ya está todo hablado hijo
Aonung: No, no lo está. Pero ni siquiera me dejáis hablar
Les ignoré e intenté dormir pero no podía. No podía parar de pensar en la cara de Leah cuándo las lágrimas se desprendían por su rostro, esa acción me rompió el corazón.