Era de noche y salí de mi choza ya que no podía dormir. No sé si Leah quiera casarse conmigo de verdad, se que somos pareja. Pero de todas maneras ella acaba de llegar, nos conoces de unos días y ya vamos a casarnos. Quizás deba decirle que si ella desea puedo intentar atravesarla por ella, haría todo lo que fuese por ella.
Leah: ¿Qué haces aquí?-dijo sentándose junto a mi-
Aonung: No podía dormir y veo que tú tampoco
Leah: ¿Quieres ir a nadar?
Aonung: Vamos-nos levantamos-
Mientras que nadábamos los peces que brillaban y los corales eran los únicos que iluminaban el mar. Leah estaba asombrada al verlo, como si fuera la primera vez.
Leah: Creo que allí hay algo, vamos-dijo por signos-
Aonung: Es peligroso
Leah: Vamos no nos pasará nada-me miró con ojos suplicantes y no pude decir que no-
Aonung: Está bien
Nos adentramos en una especie de cueva que estaba ente unos stack a lo lejos de la isla y se veía una pequeña luz en el fondo.
Leah: Vamos a mirar
Aonung: No, si te pasa algo es mi responsabilidad
Leah: Cuidando de la nueva Na'vi que lindo
Aonung: No, estoy cuidando de mi novia. A la que debo proteger y no me parece buena idea ir allí-me sonrió-
Leah: No va a pasar nada, se ve aquí no viene nadie ya que no se escuchan nada más que nuestras respiraciones-posó sus manos en mis hombros-
Aonung: Si escucho algo raro nos vamos, ¿entendiendo?
Leah: Si, gracias-me dio un beso en la mejilla para así caminar-
Nos adentramos un poco más en la cueva y cada vez me estaba gustando menos.
Aonung: Leah vámonos
Leah: Pero si ya casi estamos-se giró hacia mi-
Aonung: Leah aceptaste que nos iríamos si te lo pedía
Leah: Lo acepté pero solo si se escuchaba algo-se volvió a girar-
Aonung: Leah por favor, no quiero que te pase nada
Leah: Aonung mira-señaló a la cueva-
Me acerqué hasta ella para poder ver una pequeña charca dentro de la cueva, era hermosa. Exactamente así:
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Leah: Este sitio es precioso-dijo bajando-
Aonung: Si, pero hazme caso-le dije serio-
Leah: Vamos Aonung no te ha pasado nada-agarré sus brazos sin ejercer fuerza-
Aonung: Leah no es solo que no me haya pasado nada, me preocupas más tú. Por favor amor necesito que me hagas caso en estas cosas, no es que quiera controlarte y que me hagas caso en todo. Pero solo necesito que estés segura, ¿vale?-la abracé-
Leah: Vale, perdón Aonung. No sabía que podrías estar tan preocupado por mi, lo siento
Aonung: Amor no pasa nada, también entiendo tu entusiasmo por venir aquí. Vamos a meternos anda-se separó de mi sonriendo-
Leah: ¿Habías venido alguna vez a este sitio?-dijo mientras entraba al agua seguida por mi-
Aonung: No, sinceramente no creo que nadie lo conozca a parte de nosotros
Leah: Bueno, podría ser nuestro lugar-se abalanzó a mi para abrazarme-
Aonung: Sería genial
Leah: No debemos tardar mucho ya que si nuestros padres se dan cuenta nos matan y más los tuyos
Aonung: Mi madre está empezando a aceptarte, se está dando cuenta de que no eres mala para mi
Leah: Ya es un avance-sonrió-
Aonung: ¿Estás segura de casarnos? Si lo deseas puedo atrasarla o intentarlo
Leah: Si, está bien así. A los dos nos parece algo precipitado, pero si tú madre lo desea para aceptarme del todo lo haré
Aonung: Menos mal, estaba algo preocupado por ello
Leah: Está todo bien tranquilo-me besó-
Leah y yo pasamos varias horas en la cueva, tuve que correr detrás de ella para que no me hiciera más bromas. Nos dimos cuenta de que ya era tarde y nadamos hasta el pueblo.
Aonung: Nos vemos en la mañana amor-le besé-
Leah: Buenas noches-me sonrió y nos separamos para ir a nuestras chozas-
