Siempre pensé que lo que posee todo el mundo y el estilo de vida que lleva la gente, en general, te acerca al olimpo de la felicidad. Puedo confirmar que eso, por suerte o por desgracia, es mentira.
Ese fin de verano, me propuse tener lo que aparentemente hace feliz a todo el mundo. Empecé, por el tema de la pareja. Comprobé que pensar en alguien siempre empieza por ilusionarte, pero que, es inevitable que, si tu mente la ocupa una persona...esa persona no deja espacio a otra. Entonces, tienes que elegir.
Sobre todo, tienes que elegir si debes apostar por alguien o no. Aunque de nada sirve si tú apuestas por ese alguien si ese alguien no apuesta por ti.
Ahora hablo de la felicidad. Es preciosa la frase que dicen de "aprender a ser feliz uno mismo". Pero la capacidad de amar está derivada de amarse a uno mismo. Pienso que en mis 22 años de existencia sobre la faz de la Tierra, he aprendido a conocer qué me hace feliz.
El filósofo Epicuro dijo que "no es más feliz quien consigue más placer, sino quien mejor evita el sufrimiento". Sin embargo, investigando sobre felicidad, llegué a una idea increíble de otro filósofo que decía lo siguiente:
ESTÁS LEYENDO
Un millón de cartas para ti.
Historia CortaSi fuera un diario, en vez de llamarse "El Diario de Noah", se llamaría "El Diario de Carmen". Pero ha decir verdad, ¿a quién le importa más mi historia que a mí? Las palabras siempre me han ayudado a hacer tangible aquello que siento. Lo digo como...
