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Al dia siguiente Nahoya se despertó solo, no había rastro de Ran por ningún lado, lo busco en su estudio pero tampoco estaba ahí así que solo asumió que habría salido a la cubierta del barco.

Se cambió de ropa por una falda y camisa anchas para poder salir, el sol se hayaba resplandeciente en lo más alto del cielo y había mucho movimiento en la embarcación.

Rápidamente visualizó un par de trenzas y empezó su camino hacia el, aunque mientras más se acercaba podía notar miradas de sorpresa, otros con recelo y una que otra que solo podía describir como desagradable ya que se consentraban en puntos muy específico de su cuerpo.

Al llegar con el más alto le tocó el hombro pues aún no se percataba de su presencia.

Ran: señorita Kawata, despertó antes de lo que esperaba, como se encuentra?

Al voltear Ran a verlo pudo notar de que todos habían dejado de verlo, como si el Haitani fuera una especie de espanta moscas.

Nahoya: me encuentro bien señor Ran, gracias por preguntar.

El de trenzas se le había quedado mirando fijamente en silencio, lo que de a poco empezó a incómodar al de cabello melocotón.

???: esta es su nueva adquisición capitán?, No está nada mal.

Nahoya no pudo evitar mirar con mala cara al hombre que había hecho el comentario, aunque sin borrar la sonrisa de su rostro.

???: y se ve que tiene carácter, me agrada pero ... no crees que Yumemi se pondrá celosa?

Ésto último hizo que el Haitani se riera un poco y despertó una pequeña duda en el Kawata "¿Quien es Yumemi?".

Ran: ya tendré tiempo de presentarlas adecuadamente cuando hagamos la escala en tierra de nadie.

Ahora ambos hombres reían juntos, pero de repente el hombre rubio que estaba junto al de trenzas se detuvo.

???: que grosero de mi parte no presentarme de forma adecuada con la señorita - dijo mientras le tendía la mano al más bajo - soy Yasuhiro Muto, a su servicio.

Pese a que dudo un poco al inicio al final termino aceptando la mano del más alto.

Nahoya: Nahoya Kawata.

Ran: señorita, por qué no regresa a mi estudio mientras le consigo algo para comer?

El pelinaranja hizo caso a las palabras del Haitani de inmediato, más que todo porque tenía hambre, además de que estaba tratando de darle a Ran la ilusión de ser alguien "obediente".

Una vez que el Kawata ya no estaba en escena los hombres prosiguieron con la conversación.

Muto: seguro que si fue buena idea traer a dos jovencitas al barco capitán?, muchos de los hombres que estan aquí a veces no ven mujeres en meses y se pueden un poco...intensos.

Ran: tienes razón, el que se atreva a tocarla o a siquiera mirarla de forma indebida le arrancó las manos y le cortó los huevos, se que sabrás cómo correr la voz Yasuhiro, confío en ti.

Sin más el hombre vio como se alejaba su capitan, un poco sorprendido por su actitud, jamás lo había visto proteger tanto una recompensa.

...

Souya estaba un tanto confundido, se acababa de levantar y su cerebro aún no procesaba bien la información, así que solo tomo un pedazo de manzana y se lo metió en la boca.

Rindou lo había levantado para que pudieran desayunar juntos.

En la bandeja había fruta picada y lo que parecían unas galletas a base de granos, el peliazul estaba un poco confundido, no entendía por qué el hombre que apenas ayer lo había intimidado hasta el punto de hacerlo considerar saltar del barco ahora actuaba dulce con él.

Rindou: durmió bien señorita Kawata?

Souya solo acintio con la cabeza mientras seguía comiendo algunos trozos de fruta, a lo que el joven de lentes solo le sonrió.

Rindou: me alegro mucho, le gusta la fruta?

Souya: si.

Las respuestas del Kawata eran breves y cortantes, lo cual no era del agrado del rubio pues él buscaba tener una conversación un poco más larga.

Rindou: alguna otra cosa que le guste aparte de la fruta,?

Souya: me gusta mucho pintar y  los animales, en casa teníamos muchos.

De repente un sentimiento de profunda tristeza invadió al gemelo menor, extrañaría mucho a sus animales, pero en especial a sus hermanos.

Unas pequeñas lágrimas empezaron a salir de los ojos del peliazul, algo que no paso desapercibido para el de mechas azules.

Rindou: se siente bien?

Souya: si, no se preocupe.

Al intentar quitar una lágrima de la mejilla del más bajo este aparato su cuerpo de forma instintiva, eso molesto un poco al Haitani.

Rindou: el closet que está ahí al lado es suyo, puede dedicarse el día de hoy a organizar sus cosas, ya después veré qué la puedo poner a hacer para que no se Aburrá.

Y sin más salió de la habitación.

Souya terminó de comer lo que había en la bandeja que trajo Rindou para después dirigirse a inspeccionar el closet.

No era muy grande pero si lo suficiente para sus cosas, debajo de las puertas donde estaban un par de perchas habían unos cuantos cajones.

Sin más demora empezó con su labor, empezó guardando los vestidos en las perchas, guardo un par de cosas en los cajones, en realidad no había traído mucho así que no tardó tanto en terminar su labor.

Cuando acabo, se recostó en la cama y soltó un suspiro de cansancio, aunque su paz no duró mucho porque Rindou entro en la habitación de forma repentina haciendo que Souya saltara de su lugar.

Rindou: señorita Kawata, tengo algo para usted, se que seguramente el tiempo aquí sola le parecerá tedioso así que traje a alguien para que le haga compañía mientras yo no estoy, seguramente hubiera preferido que fuera una mujer pero por desgracia hay una gran escasez de personal femenino en el barco, pero de igual forma estoy seguro de que se llevarán bien.

Detrás del de lentes apareció un joven muy alto, de cabello azul y una cicatriz en el labio.

Rindou: Souya, te presento a Hakkai Shiba.

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Espero que les haya gustado el capítulo y si es así no se olviden de votar.

*Dato random sobre piratas*

Sabían que los piratas no dejaban subir mujeres a los barcos porque se ponían celosos?(Los barcos, no los piratas)

Los piratas tenían la tradición de nombrar a sus barcos con nombres de mujeres, por lo que se creía que si una mujer subia la embarcación se pondría celosa y ya no seguiría las órdenes del capitán lo que tarde o temprano acabaría en el hundimiento del barco.

Por eso si se encontraban a mujeres en los barcos se las lanzaba al mar sin pensarlo 2 veces.

Nada más que Ran y Rindou no creen en esas cosas y por eso les valió queso subir a dos mujeres al barco.

dear captain - ringry/ranleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora