-EPÍLOGO-

809 75 30
                                    

El bautizo de Menma fue algo sencillo, la hacienda de Kurama se vistió con lo mejor para festejar a su nieto, Utakata realizo una elegante comida en el campestre sin duda había una gran piscina con un asadero enorme

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El bautizo de Menma fue algo sencillo, la hacienda de Kurama se vistió con lo mejor para festejar a su nieto, Utakata realizo una elegante comida en el campestre sin duda había una gran piscina con un asadero enorme.

Los amigos de ambos se reunieron para dar el mejor banquete, ya que Itachi junto con Deidara ya llevaba a su pequeño hijo con ellos, esperaron el tiempo prudente para reorganizarse.

El pequeño Madara apenas con un mes de nacido era la viva imagen de su padre varón sus ojos negros como su cabello era la adoración de ambos.

No podía quedar atrás Kakashi e Iruka con su pequeño doncel que era la adoración de ambos aunque Kakashi era demasiado sobreprotector con Daichi Hatake.

Otro matrimonio que estaba contento con su pequeño sin duda algo perezoso Shikamaru con su bebé Shikadai Nara.

Pero lo que más sorprendió fue que Sai Shimura amigo de Sasuke llevara a Gaara, según ambos eran buenos amigos pero ahí había algo más que amigos.

Sasuke al principio fue renuente con que estuviera ahí Gaara por lo que había hecho en el pasado, pero Sai intervino asumiendo la responsabilidad si Gaara se propasaba con Naruto.

- Tranquilo Uchiha, estaré al pendiente de que Gaara no se acerque a Naruto.

Sasuke con una cara de pocos amigos veía a Gaara platicando muy amenamente con su hermano Temari cargando amorosamente a su sobrino.

- Espero que no se meta con mi chico o no respondo, Sai.

Con esa sonrisa cínica de Sai palmeo el hombro de Sasuke admitiendo que no dejaría que Gaara se involucre con Naruto.

Temari lo mismo estaba diciéndole a Gaara.

- Espero que no te metas en problemas con Uchiha por que no voy a meter las manos por defenderte.

Gaara miro a su sobrino.

- Ya aprendí mi lección no te preocupes, no me meteré en la vida de esos dos.

Vio de reojo como Naruto llevaba en brazos a su bebé que le abrazaba amorosamente, Gaara entendió que obsesionarse con Naruto fue una gran estupidez, ya que en ningún momento el Namikaze nunca le dio una oportunidad y nunca se la dará.

Kurama se acercó hasta donde estaban Sai y Sasuke a ambos dio unas palmadas en la espalda.

- Tranquilo Uchiha, Sai me ha prometido que su pareja no dará ningún problema.

Sasuke alzo una ceja.

- ¿Tu pareja?

Sai sonrió.

MI ENEMIGO... MI ESPOSO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora