-VENECIA-

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- En ese caso, te llevaré al lugar en el que nos conocimos

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- En ese caso, te llevaré al lugar en el que nos conocimos. Al lugar en el que empezó todo —susurró él sin dejar de mirarle los labios—. Te mostraré el lugar en el que te besé por primera vez.

- ¿Y cuál es?

- Venecia... Taiyôkô.

- ¡Venecia! —. Sabía que debía negarse. Sabía que debía quedarse en Toronto y consultar al especialista que el médico Hebi le había recomendado, pero no pudo pronunciar ni una palabra.

Permaneció atrapado en sus sueños románticos. Sasuke había atrapado en su sutil telaraña al Kitzune.

Sasuke levantó una mano para acariciarle suavemente el labio inferior con el pulgar.

- Ven a Venecia — Le susurro casi a unos milímetros de los labios—. Te lo enseñaré todo —añadió mientras le enmarcaba el rostro con las manos—. Y luego, te casarás conmigo. Taiyôkô.

Naruto se perdió en esas obsidianas solo vio esa sensual sonrisa que le mostró el azabache, la mariposa cayó perfectamente en la trampa de la telaraña, así fue atrapado Naruto Namikaze por el magnate Sasuke Uchiha.

En ese mismo momento lo tomo en brazos para ir al aeropuerto Juûgo tomo lo que el rubio llevaría al fin y al cabo compraría ropa nueva en cuanto llegaran a su nuevo destino.

Al llegar al aeropuerto fueron directos al hangar para hacer los trámites correspondientes ya que no dejaría que ese Kitzune se le fuera de las manos.

- Boss, ya está todo en regla, es hora de despegar.

Sasuke volteó para tomar de la mano al Namikaze que estaba un poco confundido con todo lo que estaba pasando a su alrededor, al llegar al Jet fue recibido por Suigetsu.

- Bienvenidos estamos a punto de despegar, nuestro capitán en un momento dará las indicaciones.

Naruto observo al peliblanco que le sonrio mostrando sus bien afilados dientes que el Blondo se sorprendió, Sasuke lo sentó y le puso el cinturón de seguridad.

- ¿Te duele la cabeza?

- Sí, he sentido una leve punzada en mi cabeza.

El azabache reviso el medicamento que el médico le dio para cuando sintiera dolor.

- Un botellín de agua.

Inmediatamente se la dieron el cual abrió dio las pastillas al rubio para que pudiera tomar su medicamento.

- Toma esto cuando despegue el avión te llevare al compartimiento para que descanses.

El rubio solo le miraba se sentía mimado por ese azabache no sabiendo que Uchiha Sasuke ya tenían trazado sus planes referente a él.

MI ENEMIGO... MI ESPOSO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora