-PREPARATIVOS-

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Tener a Naruto entre sus brazos era estar entre el cielo como en el infierno, sentir ese cuerpo poder besar esos labios con esa hermoso rostro de un ángel

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Tener a Naruto entre sus brazos era estar entre el cielo como en el infierno, sentir ese cuerpo poder besar esos labios con esa hermoso rostro de un ángel. El fuego le abrasó por todas partes. Le colocó la mano en la nuca y enredó los dedos en su hermoso cabello para poder profundizar el beso.

Sentir la calidez que emanaba era una tortura. Llevaba meses odiándolo, deseándolo. ¿Por qué el hecho de poder besarlo por fin le abrumaba más de lo que lo había hecho nunca? No era sólo deseo lo que había hecho que el beso fuera diferente. El beso era diferente porque Naruto era diferente.

Se apartó de Naruto y lo miró. Naruto seguía teniendo los ojos cerrados. Una hermosa sonrisa se le había dibujado en los labios. Con su kimono y su corte de cabello nuevos, parecía dulce, natural. Verdadero.

Sasuke sintió un profundo deseo de llevárselo a la cama. De hecho, había extendido la mano para llevarlo de camino al hotel cuando se detuvo en seco.

¡No!

No podía olvidar con quién estaba tratando. El Doncel dulce e inocente que había delante de él era sólo un espejismo. El verdadero Naruto Namikaze era un Kitzune astuto como superficial, un mentiroso egoísta. Le había dado a él su virginidad sólo para poder traicionarle con otro hombre.

No podía consentir que ella ganara. En aquella ocasión, la victoria estaría de su lado.

- Cásate conmigo Taiyôkô - Reiteró una vez más -. Cásate conmigo ahora mismo.

Sasuke observo el bello rostro del Kitzune.

- Está bien. – Susurro NarutoEstá bien...

Sasuke exhaló un suspiro. Él quería confirmar si lo que oyó era verdad.

- Hoy mismo...

Sin dudarlo Naruto le volvió a decir.

- Sí, me casaré contigo hoy mismo. - Mirándolo con un rostro feliz, casi lloroso. Sasuke lo tomo en vuelo la suave risa del rubio se dejó escuchar. Hay cierta distancia estaba acercándose Itachi que claramente escucho cuando el azabache le propuso matrimonio al Namikaze.

Que grito de asombro.

- ¿Qué se va a casar Sasuke Uchiha? – Hasta que llego hasta donde estaba la pareja Sasuke bajo con cuidado a Naruto. - ¡No me puedo creer que lo acabe de escuchar!

Sasuke se dio la vuelta se encontró con Itachi. Sabía que estaba en Venecia por lo de su esposo, no podía reclamar nada, al contrario le debía una explicación al azabache mayor.

- ¡Itachi! – Le dio un fraternal abrazo - ¿Qué estás haciendo aquí?

Pero aun Itachi estaba absorto con la noticia que escucho de primera voz, sin duda era algo que todas las redes sociales deberían de estar en este mismo instante en comunicarlo, pero aún no lo hacía.

MI ENEMIGO... MI ESPOSO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora