-BODA-

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La pequeña Mia era la encargada de esparcir los pétalos blancos por el pasillo hasta llegar al altar que era decorado por las flores más hermosas, Deidara dio lo mejor para que todo saliera bellamente

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La pequeña Mia era la encargada de esparcir los pétalos blancos por el pasillo hasta llegar al altar que era decorado por las flores más hermosas, Deidara dio lo mejor para que todo saliera bellamente.

- Yo soy la que lleva las flores.

Una enorme sonrisa se puso en el rostro de la pequeña que vestía como una pequeña hada, Deidara pidió que le dieran la canasta.

- Muchas gracias, Deidi por todo lo que tu esposo como tú hacen por nosotros.

- No te preocupes son nuestros mejores amigos, ahora deja te acomodo el velo del kimono.

Deidara lo coloco enfrente del espejo que estaba frente del ventanal era de gran tamaño se podía ver en diferentes ángulos. Naruto se miró de nuevo en el espejo y sintió cómo el corazón le latía con fuerza en el pecho. En menos de una hora, estaría casado con un hombre al que apenas conocía.

Un hombre al que sólo recordaba de los últimos días. El hombre del que, a pesar de todo, estaba en gravidez. No podía creer lo que estaba haciendo aun dentro de él sentía que no debía ¿Pero? Ya era demasiado tarde los preparativos ya estaban hechos.

No podía retractarse ver el esfuerzo de Deidara era sin duda impresionante, su boda en un lugar de ensueño para una mujer o doncel. Naruto pensó en su noche de bodas sus mejillas se arrebolaron.

Si cuando lo besaba le robaba el aliento, ahora, cuando estuviera totalmente a solas con él, su pobre corazón no dejaba de palpitar fuertemente. Se pudo tranquilizar no debía de estar pensando en cosas irreverentes. Y aquella noche, volvería a besarlo. De hecho, haría mucho más. Aquella noche, su noche de bodas, lo llevaría a la cama y le haría el amor.

Un escalofrío le recorrió el cuerpo. De repente, no pudo pensar en otra cosa. Todas sus dudas desaparecieron. En lo único en lo que podía pensar era en eso.

Al ver a Naruto ya listo Deidara se llevó sus manos a su boca, Iruka dio unos cuantos detalles para que resaltara la belleza del kimono de hecho el rostro del rubio se podía ver radiante.

- Te ves hermoso, si tu padre viviera estaría orgulloso de ti.

Naruto pudo verlos a través de los espejos laterales, mostrando una bella sonrisa, sin más Deidara le dijo con ternura.

- Deseo lo mejor para ti y Sasuke, una unión que perdure y que pueda enfrentar cada obstáculo que puedan tener. – No se pudo contener las lágrimas afloraron en esos bellos ojos añiles.- El matrimonio convierte el cortejo en amor de verdad, en un amor que dura para siempre y que crea una familia.

¡Una familia!

Eso era lo que deseaba Naruto formar una familia con el hombre que en pocos minutos será su esposo inconscientemente llevo sus manos a su vientre.

MI ENEMIGO... MI ESPOSO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora